La cuarentena sumará graves efectos económicos para el sector primario
La aplicación de las medidas que afectan a las zonas restringidas por lengua azul parece algo más que una incidencia para el sector ganadero leonés. La vacunación de la lengua azul pillará por sorpresa a la mayoría de los productores -que aplican el manejo de la trasterminancia y trasladan a los rebaños a los puertos de verano- dentro de la zona de restricción. De ella no podrán sacra los animales hasta superar un periodo de seguridad que marca el protocolo de actuación frente al virus (serotipos 1 y 8): el movimiento de las reses del lugar de vacunación se podrá iniciar una vez que hayan transcurrido 70 días desde la aplicación de la vacuna frente a los dos serotipos. Existe una alternativa, más costosa para los propietarios de los rebaños, que es realizar una muestra a los animales a los 25 días de la aplicación de la vacuna y siempre que la toma establezca la inmunidad de la res ante las variantes del virus objeto de la campaña de control sanitario. Revacunación a los 21 días El calendario de vacunación tiene una segunda fecha; la revacunación se produce 21 días después de la primera dosis. Esta circunstancia hace que en los tres meses siguientes a la aplicación de la dosis de inmunidad se considere la cabaña inmovilizada. La llegada a León de las medidas más estrictas de todas las que han dispuesto las autoridades ministeriales frente al avance de la infección se produce ocho meses después de que se declararan los casos positivos en Asturias, objeto del traslado al norte del protocolo de zona restringida ante la lengua azul, que ya se ha aplicado en las últimas campañas en la mitad sur de la península. Anillo de seguridad Testigos de ello son los productores leoneses, que ya superaron varias cuarentenas en las dehesas extremeñas a las que acuden habitualmente en época invernal. El anillo de seguridad, sin embargo, se expande a León por el flanco norte -con referencias preocupantes por el comportamientos del virus en zonas ganaderas cántabras- ante el temor a que se repitan los casos positivos y se extienda el virus. Dosis por miles El Gobierno destina este año más de cuarenta millones de euros a combatir el avance de la enfermedad y ya ha adquirido 10 millones de dosis de vacunas. Por miles se van a distribuir entre los rebaños de vacas y ovejas en los puertos leonesas y las cientos de explotaciones estables que se asientan por toda la zona de la montaña leonesa, en el tercio norte, desde los Ancares a Picos de Europa. Comarcas ganaderas referentes en la actividad, como Babia o la montaña de Riaño se ven atrapadas por los tiempos de respuesta al posible avance del mosquito por los pastos leoneses.