Un ajuste de cuentas por drogas

Los hechos se produjeron el sábado, alrededor de las 13.15 horas, en Villaobispo. El grupo de los tres agresores encontró al fallecido en un domicilio de la calle Blasco Ibáñez. Al presentir que le querían matar, según fuentes de la investigación, el joven salió con una escopeta de cañones recortados, junto a su hermano y otra persona, detrás del otro grupo, que llevaba un arma corta. En la calle Menéndez Pelayo, perpendicular a Blasco Ibáñez, el fuego cruzado terminó con A.R.F. muerto en la acera. La banda de su presunto homicida en un Peugeot 406 que luego apareció abandonado cerca del laboratorio pecuario, en la zona de La Puentecilla, con cinco impactos de bala. El cuarto huido se escapó en un Audi A3 después de intentar introducir al finado en el vehículo para transportarlo, mientras que el hermano fue detenido por tenencia ilícita de armas.