| Análisis | Plantillas desiguales |
Un conservatorio en solfa
Más allá de traspasos ilegítimos y de sentencias sin ejecutar, el Conservatorio de Música de León tiene la mitad de profesorado del exigido por la Unión Europea y una matrícula muy limitada
león
La sentencia del TSJ deja claro que las administraciones no se pueden «cambiar cromos» a su antojo. Que hay un procedimiento legal, en el que se contempla, entre otras cosas, escuchar a la parte social. Es la tercera vez que el TSJ se lo dice a la Junta, después de dictar otras dos sentencias idénticas en el caso de los conservatorios de Burgos y Valladolid: «Servirá para otra ocasión», sostiene la Consejería de Educación.
La cuestión es que ahora ya nadie quiere dar marcha atrás, ni la Junta, ni los trabajadores a los que representa Comisiones Obreras. Pero al margen de traspasos ilegítimos y de sentencias sin ejecutar, hay una realidad innegable: que el Conservatorio de León, con 2,4 profesores por diez mil habitantes, tiene la mitad del profesorado que recomienda la Unión Europea y una matrícula muy limitada, que no sobrepasa los 450 alumnos y alumnas.
Si los trabajadores «ilegítimamente» traspasados se quejan de que no pueden concursar, es decir, no pueden salir de León, desde la Asociación de Profesores de Conservatorios de Música de Castilla y León se lamenta que León sea un coto cerrado al personal que ganó los concursos-oposición de la Diputación. A ellos, que ganaron una oposición estatal, también les está vetado «entrar» en el Santos Ovejero mientras no se amplíe la plantilla para aumentar la matrícula. Y la Junta sabe que cualquier profesor del cuerpo estatal podría reclamar la dirección del centro en tanto el personal de la Diputación no ingrese en el mismo. Vamos, que el conservatorio sigue en solfa.