Diario de León

Caboalles de Arriba

Matan a hachazos a dos vacas y dejan herida a otra

Las reses habían sido premiadas en el certamen de raza asturiana de los valles.

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V. Araujo | Caboalles de arriba
León

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Un total de tres cabezas de ganado vacuno de la explotación de María Luisa Gómez, de la pedanía lacianiega de Caboalles de Arriba, sufrieron cortes en las patas traseras que provocaron la muerte de dos de éstas y dejaron herida a la tercera.

De los tres animales afectados, dos habían obtenido el premio al mejor lote de criador y de establo de tipo culón en el Certamen Provincial de Rebaños de Asturiana de los Valles, que se celebró en la capital lacianiega a finales del pasado mes de octubre. Los animales atacados eran de raza asturiana de los valles y se cree que los cortes pudieron hacerse con un hacha, ya que las patas de las reses estaban cortadas casi en su totalidad. El animal herido mostraba una lesión en una de sus patas, aunque presentaba el corte un poco más abajo que las que murieron y fue posible suturar la herida antes de que se desangrara. Todas las reses mostraron un corte limpio en su pata trasera izquierda. Según indicaron, las dos vacas perdidas tardaron cuatro o cinco horas en morir a tenor del corte que presentaban y de los restos de sangre que se pudieron ver en el pasto que ocupaban.

Los hechos ocurrieron cuando las vacas se encontraban en una finca que la ganadera de Caboalles de Arriba tiene en una zona del pueblo denominada el Fontanal y en la que se encontraban un total de 11 reses. Fue sobre las once de la mañana del viernes cuando la propietaria del ganado conoció lo sucedido, gracias a un vecino que se percató de lo ocurrido al pasar por la finca en la que las reses pastaban.

Sin precedentes

El hecho, muy comentado entre los ganaderos de la comarca de Laciana y los vecinos de Caboalles de Arriba, sorprendió también a la dueña de las reses que sufrieron el ataque, que no tiene sospechas de que nadie quisiera hacer daño a los animales, ya que nunca se había producido un episodio parecido.

María Luisa Gómez denunció el suceso ante el cuartel de la Guardia Civil de Villablino.

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