Vegacervera
Un homenaje para el alcalde de siempre
El templo de Nuestra Señora de Las Nieves no pudo albergar a todos los asistentes al funeral de Rodríguez Aller.
Parte de los asistentes siguió el funeral fuera del templo.
Vegacervera despidió ayer a su alcalde de siempre, Luis Rodríguez Aller, que falleció el domingo por causas naturales, cuando practicaba la caza, una de sus aficiones preferidas.
Tras dos jornadas de luto intenso en León, donde se instaló la capilla ardiente, los vecinos de Vegacervera mostraron ayer su cariño a Rodríguez Ayer, en un nuevo velatorio, instalado en el salón de plenos del Ayuntamiento. Dolor e incomprensión por la repentina muerte del regidor volvieron a marcar el ambiente entre las dos de la tarde y la hora del funeral, las cinco. Como era de esperar, los presentes no cabían en la iglesia de Nuestra Señora de las Nieves. Muchos siguieron la misa de funeral en el exterior del templo.
La familia socialista no dejó sola a la del regidor. Así, en Vegacervera estuvo el secretario de Organización, César Luena; el secretario general de los socialistas en Castilla y León, Luis Tudanca, y la cúpula del PSOE en León, encabezada por el secretario provincial, Tino Rodríguez, al que acompañaban los diputados provinciales de su partido y los alcaldes y portavoces de la gran mayoría de los municipios leoneses.
Tampoco faltó la representación institucional de la Junta, la Diputación y del Partido Popular. Así, a las exequias asistió el la subdelegada del Gobierno, Teresa Mata; consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones; el presidente de la Diputación, Juan Martínez Majo; su vicepresidente primero, Francisco Castañón, además de otros diputados provinciales. El coordinador provincial de IU, Santiago Ordóñez, se sumó a la jornada de duelo, además de otras autoridades civiles y militares.
Servicio a León
En la homilía del funeral se destacó la figura de un hombre que ostentó la alcaldía del municipio montañés durante 25 años, en los que desarrolló múltiples proyectos en beneficio del municipio y que trascendió el ámbito municipal para velar por los intereses de toda la provincia. Terminado el oficio religioso, se vivió uno de los momentos más emocionantes de la jornada, cuando las cenizas de Luis Rodríguez Aller abandonaban el templo entre aplausos y lágrimas de los presentes. La urna regresó al salón de plenos del Ayuntamiento, donde los vecinos continuaron despidiendo a su alcalde. Los restos del regidor serán depositados en el panteón familiar.