Tres plataformas rurales crean una alianza para ser la voz de la España vaciada en León

La casa de cultura de Veguellina de Órbigo acogerá este sábado el acto de presentación de la llamada «Revuelta de la España Vaciada», un movimiento respaldado por tres plataformas leonesas —León Ruge, Colectivo Ciudadano Región Leonesa (CCRL) y Nós Terra Maire— abiertas a nuevas adhesiones en la búsqueda de soluciones reales y efectivas contra la despoblación que amenaza de manera implacable a las zonas rurales de la provincia.

El portavoz de estas tres plataformas, Sergio Díez, avanza que en este encuentro se explicará el modelo de desarrollo y las líneas generales con las que se pretende atajar esta «lacra» social.

La presentación constará de dos partes, la primera de ellas, a las 11.00 horas, en la que se establecerá contacto con otras asociaciones para lograr nuevas adhesiones al proyecto, y la segunda, a las 18.00 horas, para el público en general hasta completar aforo.

«El objetivo es dar a conocer a la opinión pública todo el trabajo que desde hace años estamos realizando desde estas plataformas para sentar las bases de la lucha contra la despoblación», destaca Sergio Díez, que es además el presidente de León Ruge, plataforma civil constituida hace dos años y que desde este mes de octubre realiza cada sábado protestas en distintos puntos de la provincia para hacer llegar a la opinión pública las reivindicaciones concretas de cada territorio.

María Pérez, directiva por León de CCRL y socia de base de Nós Terra Maire, destaca el «enriquecedor» trabajo realizado hasta ahora a través de las ocho mesas sectoriales constituidas entre 180 asociaciones a nivel nacional para elaborar «unas conclusiones y unos objetivos que al final no están tan difusos».

«A pesar de la diversidad territorial que tenemos en España todos tenemos los mismos problemas. A pesar de ello, nos hemos entendido a la perfección, no se entiende que los políticos no lo hagan», destaca María Pérez que insiste en la necesidad de crear «otro modelo de desarrollo a nivel estatal» con un reparto más equitativo de los polos de desarrollo en las distintas capitales de provincia y cabezas de comarca. «Queremos un desarrollo en base a los recursos que tenemos, unos recursos que suministramos al resto del país, sin que quede nada en nuestro territorio», explica Pérez. En este sentido destacó que como punto de partida hay que promover un cambio de mentalidad. ««Hay que acabar con la confrontación entre lo urbano y lo rural, no son conceptos antagónicos, lo único que pedimos desde las zonas rurales es tener los mismos derechos y los mismos servicios, que se nos valore y se nos de la importancia que merecemos». Por eso pide que no se utilice el término de España vacía y se insiste en que emplee «vaciada», pero «vaciada por la falta de voluntad política y desde el más absoluto abandono institucional».

Para conseguir revertir esta situación propone la necesidad de desarrollar un sentimiento de arraigo hacia las comarcas, acabar con la burocracia que pesa sobre todo tipo de emprendimiento rural, vertebrar con medios de comunicación de personas y mercancías que lleguen a todo el territorio, impulsar la conexión telemática y descentralizar las administraciones para repartir los polos económicos, entre otras propuestas.