Las obras del eje monumental suponen una pérdida de 200 aparcamientos regulados
El Ayuntamiento anuncia que no aplicará la ORA a más calles de la ciudad
La zona azul dispone de 317 plazas de pago tras la peatonalización y una ampliación
Los vehículos no podrán aparcar en la plaza de San Bartolomé una vez que concluya su reforma
El Ayuntamiento de Astorga descarta extender la ORA a nuevas calles de la ciudad, según confirmó el concejal de Tráfico, Joaquín Carro. La progresiva semipeatonalización del eje monumental ha supuesto una pérdida de unos ciento cincuenta estacionamientos regulados desde que el servicio entró en funcionamiento en Astorga a finales de los años noventa, época en la que la ciudad disponía de 465 plazas en zona azul, y de más de doscientos respecto al momento de mayor número de aparcamientos regulados, 530, según el edil. Éste calculó que las plazas de pago disminuirán hasta las 317 con las ya suprimidas en el eje y con las que desaparecerán en las plazas de Santocildes y San Bartolomé y la calle Padres Redentoristas. La cantidad incluye las surgidas con la reciente aplicación de la ORA a varias calles de la zona centro, según cálculos del propio Carro. La desaparición de plazas reguladas podría tener consecuencias para la empresa adjudicataria del servicio, Dornier S.A., si llega el caso de que la gestión de estos aparcamientos resultase deficitaria. Precisamente, la compañía, con el argumento de la reducción de plazas en zona azul por la remodelación del eje monumental, solicitó hace unos meses la ampliación de la ORA, petición que el Ayuntamiento aceptó y derivó en la creación de 81 nuevos estacionamientos de pago en las calles Alcalde Carro Verdejo, Matías Rodríguez, Luis Braille, Jardín y Bajada del Postigo, así como en la plaza de San Francisco. Reducción de personal Cabe recordar que en aquella ocasión Dornier planteó la ampliación de la zona azul como alternativa a una hipotética reducción de personal derivada de la progresiva desaparición de aparcamientos regulados. La adjudicataria da trabajo a cuatro controladores más el responsable de la plantilla, indicó Carro, que matizó que la empresa suele emplear de media a un controlador por cada cien plazas. El Ayuntamiento de Astorga deja en manos de la empresa concesionaria del servicio la decisión que ésta pudiera tomar respecto a su negativa a ampliar la zona de la ORA. Mientras, los responsables municipales esperan conocer el resultado económico del último año de gestión, que finalizó el pasado 31 de octubre.