La Bosquicopa Mundial de Fútbol

Y a hemos traído en otras ocasiones a estas páginas a Rasi y su pandilla —Nora, Aitor, Irene, Ismael—, que en este nuevo título espera ansiosa a la ardilla. Y es que «Rasi forma parte de la Selección de Animales de Fútbol de Ardillas. Su equipo se había clasificado para la Bosquicopa de Fútbol» y sus amigos tienen ganas de saber cómo le han ido las cosas.

Las eliminatorias enfrentaban a conejos contra mofetas, caracoles contra búhos, zorros contra ardillas… «Pocos creían que las ardillas pudieran ganar». Pero como todo parece imprevisible en cualquier campeonato de fútbol, aquí no podía ser de otra manera. Y, claro, también pasaron muchas cosas, muchas cosas curiosas, simpáticas y llenas de imaginación, como se desprende de esos apuntes de las crónicas de los partidos, llenos de avatares e incidentes.

Que se lo pregunten, si no, a Topi, el árbitro, y a sus asistentes, llamados Lini y Piatón.

Lo cierto es que a la final llegaron los equipos de las ardillas y los caracoles, aunque en este último jugaba también la babosa Babi, que a la larga resultaría determinante en el desarrollo del partido. Seguro que os podéis imaginar por qué. La lectura, en cualquier caso, aclarará cualquier duda. Así que, contra todo pronóstico, Rasi y su equipo tuvieron que conformarse con el segundo puesto, cuyo premio fue… una medalla muy especial. Como la que, en la última página, el lector puede decorar a su gusto y escribir en ella lo que quiera.

Con una diagramación limpia que permite una lectura fácil y agradable, la autora utiliza una prosa sencilla y cercana a los intereses y posibilidades de los destinatarios. Las ilustraciones, llenas de color y gracia, están en sintonía perfecta, por su carácter también narrativo, con el texto.