Islandia ya recibió a la marea naranja

Los encuentros afortunados no son exclusivos de la Península. El Gobierno canario ya uso esta fórmula de promoción un año antes, con el mismo método, pero en un país del norte de Europa, Islandia, uno de los más fríos.

Envió a cien voluntarios del archipiélago con las bondades del clima esta vez como bandera. La marea naranja arribó a las calles de Reiquiavik. Organizó una fiesta y convenció a más de quinientas personas, aunque sólo viajaran cien.

El turismo a las islas desde entonces ha crecido por encima del 1% y hay quien lo achaca a este tipo de campañas. Redes sociales como Facebook transportan el mensaje a una velocidad vertiginosa.

Ya hay cientos de fotografías en la red con las peripecias de los cien turistas españoles, el grupo «Encuentros afortunados 2010» tiene 150 fans y la palabra Canarias ha incrementado su presencia en la Internet.

Œas críticas a la misión son inevitables. La política entra de lleno en estas iniciativas y lo que para unos es una inversión para otros es un despilfarro.

Para saber si se han conseguido los objetivos habrá que esperar varios años, analizar al detalle los datos de ocupación turística, las pernoctaciones y, sobre todo, de qué parte provienen los incrementos. Canarias es un destino principalmente para extranjeros, atraídos por sus playas y buen tiempo. A partir de ahora debe serlo también para los propios españoles.