Diario de León
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León

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Antes se llamaban zánganos, parásitos, vagos, jetas, haraganes, y ahora se llaman «ninis». Como se ve, hasta la nomenclatura de lo deplorable puede ir a peor: Nini.

El vocablo, resultado de la unión de los «nis» contenidos en la oración «ni estudia ni trabaja», se aplica, como se sabe, a aquellos jóvenes en trance de dejar de serlo que no es que no encuentren trabajo, sino que no lo encuentran atractivo ni conveniente para sus personas, razón por la cual prefieren seguir viviendo de los padres y de la sociedad en su conjunto. Tampoco estudian nada, pero, eso sí, tienen coche.

Un caso paradigmático del «nini» es el del pollo malagueño que a sus 25 años -edad a la que, por cierto, deja uno de crecer y empieza a envejecer lenta e inexorablemente uno- ha tenido la ocurrencia -el ocio es muy malo- de denunciar a sus progenitores por considerar insuficiente la paga o propina semanal que le daban.

Se ve que había visto en Internet algo, o que había llegado a sus oídos alguna de esas leyendas urbanas que circulan entre los vagos y que les refuerzan el carisma, el caso es que, con las mismas, denunció a los padres, pero, vaya por dios, al zángano paradigmático le salió un juez que no se ha andado con paradigmas: le ha dado un mes de plazo para que abandone la casa familiar y se olvide de los padres, de las croquetas, de las deportivas, del móvil y de las letras del coche que religiosamente le pagaban, porque el zangolotino, como es natural en estos tiempos descabellados, usaba coche y los padres le pagaban las letras.

Los padres de este «nini», de ese gilipollas si se me permite la expresión, es muy probable que no sean merecedores de una medalla por lo bien que han educado a la criatura, pero esa impericia tampoco podía justificar el abuso, el maltrato y la extorsión.

El juez, que ya podía ocupar plaza en el Tribunal Supremo por lo necesitado que a veces parece andar éste de sentido común, lo ha visto así y ha mandado al «nini» donde no le vea, pero, sobre todo, donde no le vean sus propios padres, que bastante cruz llevan ya soportada.

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