Diario de León

Argumento imposible para una historia real

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alicia g. arribas | madrid
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Empiezan los fabulosos años 80 en un país que sale de una dictadura; un lugar donde la juventud bulle tras las primeras elecciones libres y en el que la «modernidad» impregna cada paso. De repente, suena una voz: «Quieto todo el mundo». Con semejante argumento, cualquiera haría una película.

La hubieran firmado desde Cecil B.DeMille, a Fritz Lang, pasando por el mismísimo Alfred Hitchcock, y hoy, probablemente, hasta Quentin Tarantino.

Han tenido que pasar treinta años para que un director de cine se haya atrevido a rodar en serio el episodio más negro de la España moderna. Y esa fecha difícil de olvidar, 23-F , es el título que ha elegido Chema de la Peña para contar qué sucedió aquel fatídico día.

Es cierto que a finales de los 70 y principios de los 80 la energía positiva que generó el país tras la muerte de Franco sirvió para empujar la democracia, en medio de una amalgama ingenua y libertaria que hablaba abiertamente de sexo, de igualdad, de drogas, de homosexualidad...

Eran, evidentemente, momentos de cambios sociales, políticos y morales que muchos no estaban dispuestos a admitir. Pero el cine español no había pasado de la comedia para contar el episodio.

El primer intento serio tiene lugar en TVE. La miniserie 23-F: el día más difícil del Rey , dirigida por Silvia Quer, emite dos capítulos donde se cuenta de modo aséptico el momento histórico del 23 de febrero de 1981.

Con Lluís Homar, en el papel de Juan Carlos I, y Emilio Gutiérrez Caba como Sabino Fernández Campo, la serie obtuvo el mayor índice de audiencia de la historia en España, con 6.491.000 espectadores en el primer episodio (31 % share) y 6.920.000 en el segundo (35 % share). Fue muy premiada, no sólo en España, donde obtuvo el Premio Nacional de Televisión, sino que compitió con éxito en los festivales internacionales de Bulgaria, Nueva York y Montecarlo.

Después, en enero del 2010, Antena 3 se aproxima al tema con la miniserie de Antena 3 Adolfo Suárez, el presidente , que arranca en el mismo momento en que Tejero irrumpe en el hemiciclo para contar la historia del ex presidente en un flashback.

En estos capítulos, Fernando Cayo, que también interpretó al rey (entonces, príncipe) en «20-N: Los últimos días de Franco», también en Antena 3, repite personaje; quizá por ello, y por su parecido físico evidente, es Juan Carlos I en el largometraje de De la Peña. Con el Congreso de los Diputados, el Palacio de la Zarzuela y el Palacio Buenavista como escenarios, el actor Paco Tous da un poco de repelús con su tricornio y su bigote negro, disfrazado del entonces teniente coronel de la Guardia Civil, el golpista Antonio Tejero.

23-F , la película, intenta adoptar «una visión clara, directa y sin juicios de valor», explicaba Tous aen un momento del rodaje. De la Peña también ha elegido a Juan Diego, que hizo de Francisco Franco en Dragón Rapide , para interpretar al personaje más ambiguo de la conspiración golpista, el general Armada.

Pero Internet nos guarda sorpresas inabordables. Tecleando, se encuentra un vídeojuego que se distribuyó ¡en 1983! para la ya antediluviana ZX Spectrum que, titulado El golpe , mostraba en su portada un come-cocos amarillo, tocado con tricornio y bigote negro. El 23-F, mucho mejor en cine.

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