España acogerá a cien inmigrantes llegados a Malta por la crisis magrebí
Rubalcaba rechaza admitir a los de Italia al no tratarse de una isla tan limitada
Rubalcaba conversa con el ministro húngaro Pinter.
El vicepresidente primero y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, anunció ayer que España acogerá «entre 75 y 100» refugiados libios y subsaharianos que llegaron a Malta, con el fin de ayudar a la pequeña isla, desbordada por casi un millar de demandantes de asilo.
Rubalcaba se pondrá en contacto con la comisaria europea del Interior, Cecilia Malmstrom, en los próximos días para enviarle una cifra concreta de demandantes de asilo llegados a Malta a los que España está dispuesta a dar protección, «aunque será un margen de entre 75 y 100» refugiados, puntualizó el ministro. España es uno de la docena de países que acogerá a los refugiados en Malta, un país que como ha señalado Malmstrom, «es muy pequeño y la llegada de 800 refugiados no es asumible para sus autoridades». Rubalcaba explicó que España, como la mayoría de países de la UE, ha querido acoger a los llegados a Malta y no a Italia por considera que «la situación es muy distinta» esos dos países.
«El grueso de los casi mil inmigrantes de Malta provienen de Libia y tienen derecho a asilo en Europa», dijo el ministro, que explicó que en cambio la mayoría de los llegados a Italia son inmigrantes ilegales procedentes de Túnez.
Italia se siente abandonada. El ministro del Interior italiano, Roberto Maroni, salió ayer de la reunión de ministros de la UE de Interior señalando la Unión Europea (UE) ha abandonado a su país al no aceptar su propuesta para repartir los inmigrantes irregulares tunecinos llegados a Italia en las últimas semanas, y se ha preguntado si vale la pena formar parte de la UE. «Italia ha sido abandonada. Me pregunto si de verdad tiene sentido continuar formando parte de la Unión Europea», dijo al terminar el consejo de ministros del Interior de la UE en Luxemburgo.
El Gobierno italiano había pedido a sus socios comunitarios el reparto por toda Europa de los más de 20.000 tunecinos actualmente llegados en Italia, propuesta que no han aceptado sus socios europeos al no tratarse de refugiados sino de inmigrantes económicos.
Rubalcaba reclamó a la Unión Europea un esfuerzo por dar «una voz común» respecto a la inmigración, igual que «existe a la hora de apoyar las transiciones democráticas en el norte de África».