Diario de León

Tabuyo abre ‘a la demanda’ San Jorge cumple 40 años

«¿Y ésto se come?», es la pregunta que repite cada otoño la gente que pide asesoramiento en la asociación micológica.

Centro micológico de Tabuyo del Monte.

Centro micológico de Tabuyo del Monte.

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El Centro Micológico de Tabuyo del Monte está «abierto a la demanda, no cerrado», recalca el presidente de la Junta Vecinal, Ángel Abajo. Hay que llegar hasta la puerta de este edificio circular para ver la cuartilla donde se ponen los teléfonos a los que hay que dirigirse para visitar el centro de interpretación.

«Antes estaba abierto y se hacían cursos», comenta una empleada de la residencia que pasea con un anciano por los alrededores. A los pocos minutos de la llamada al móvil de la Junta Vecinal aparece un joven que lo enseña voluntariamente. «Hay pocas visitas», admite. Se nota el olor a cerrado. La zona del laboratorio está sin uso. El pedáneo alega que el centro está en esta situación desde 2011 porque la Junta suprimió la subvención para el personal. Para construirlo se hizo una inversión de 97.345,50 euros, de los que 38.903,40 euros fueron subvencionados por una ayuda del programa Leader Plus 2000-2006 para equipamiento con el compromiso de mantenerlo en perfecto estado de uso durante cinco años. La obra se certificó en 2008 y el centro se abrió en 2009. El pedáneo admite que en temporada de setas «estaría bien abrirlo de continuo» para darle un mejor aprovechamiento. El Grupo de Acción Local Montañas de Teleno, que gestionó la ayuda, considera que el centro de interpretación, único en la provincia de León, se encuentra «operativo» y cumple los requisitos estipulados.

Luis Pedro García Díez es el voluntario que enseña el centro. «Este es el panel más importante», comenta señalando uno que habla del respeto a las especies que no son comestibles. «Y si comes siete gramos de ésta vas para el huerto», añade apuntando a una imagen de la Amanitas phalloide . Para el PSOE, «el centro está cerrado, mientras se gasta el dinero del pueblo en pagar hacenderas», afirma la ex alcaldesa de Luyego, Marisa Rodríguez.

El incendio de agosto del 2012 ha dejado también a medio gas la producción de setas en uno de los territorios señeros de la micología en León. Algunas zonas no verán nacer setas en 40 años.

La Asociación Micológica San Jorge de León acaba de cumplir su 40 aniversario. Cuatro décadas divulgando la riqueza micológica de León, investigando y enseñando a la gente. Más de 200 personas dan vida a este colectivo que tiene local propio en la calle Alfonso IX .

En el sótano hacen cola las tardes de otoño y también algunas de primavera las personas que acuden con sus cestas a identificar las setas recolectadas durante la mañana o el fin de semana. Más de 140 consultas llevan registradas en el libro de bitácora en lo que va de año y «faltan muchas». «¿Y esto se come?», es la pregunta que se repite día tras día durante todo el otoño entre la gente que acude en busca de asesoramiento.

Todos los martes dan charlas y realizan salidas micológicas en temporada. Cuentan con una biblioteca nutrida y un microscopio para ver de cerca la estructura de los hongos. A veces es necesario para distinguir la especie. Alguna novedad han incorporado al herbario de la Universidad de León, como la Hygrophorus marzuolos .

«Hay setas todo el año», comenta Julián Cerezal, presidente de la asociación. Y recuerda que «gracias a la acción de las setas se descompone la materia orgánica» y sin ellas las hojas y las cornamentas de los animales, por ejemplo, invadirían el terreno. Su opinión es que «cuanto más sepa la gente mejor puede respetar el campo, a nadie le hemos enseñado malas prácticas».

El objetivo de la asociación va más allá de lo gastronómico, aunque en sus jornadas anuales siempre participa algún cocinero para divulgar el potencial culinario de las setas. «Las setas, aunque sean comestibles, no se deben comer en grandes cantidades», advierte un socio.

La pasión por los hongos de este colectivo se respira en el ambiente. «El organismo vivo más grande que hay en la tierra es un hongo», apunta otro al hablar de las raíces de una especie que ocupa más de 400 kilómetros cuadrados en Norteamérica.

León es un paraíso para las setas que la asociación tiene muy presente aunque cree que debería haber una regulación micológica que ordene el sector y le de más lustre al turismo y al sector agroalimentario. La Junta trabaja en un nuevo decreto para aglutinar todas las competencias ahora dispersas en varios decretos.

Con motivo del 40 aniversario, la Asociación Micológica San Jorge ha hecho socios de honor a los fundadores, a quienes rindió homenaje en un acto público. Manuel Fernández, Fernando Armendáriz, Feliciano Rodríguez, Óscar García, Ángel Pescador y Félix Expósito.

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