El Congreso aprueba la ley que prohíbe las donaciones a los partidos

La ley de control financiero de los partidos políticos salió adelante en el Congreso la misma semana en la que el ‘caso Gürtel’ ha vuelto a colocar al PP bajo los focos. El vicesecretario de Organización de los populares defendió en el hemiciclo una norma con la que el Gobierno busca prevenir la corrupción. «Vamos a terminar con ella, porque estamos decididos a que todos aquellos que se sirven de su cargo no tengan ni un solo día de tregua ni les salga gratis», garantizó Carlos Floriano.

En el camino hacia la aprobación definitiva, pendiente aún de la tramitación en el Senado, el Ejecutivo logró el respaldo de CiU y PNV para dar luz verde a un proyecto que obliga a los tesoreros de los partidos a comparecer en el Parlamento, prohíbe que las entidades de crédito condonen la deuda de las formaciones políticas, veta las donaciones de empresas y recorta las subvenciones. El texto añade una rebaja del 20% del dinero público que se otorga por los envíos gratuitos de propaganda electoral.

Se trata de una de las iniciativas avanzadas por el presidente Mariano Rajoy y que no ha obtenido el voto positivo de los socialistas, que se han decantado por la abstención ante las carencias de una norma que se queda «corta» según la oposición. Entre los que apretaron el botón rojo, la Izquierda Plural echa en falta que de verdad se adopten medidas para evitar casos como el de Luis Bárcenas, y UPyD advierte de que la ley aborda de manera insuficiente la «pésima» percepción de los ciudadanos sobre los representantes políticos.

Desde el PP, en su turno de palabra, Floriano reprochó la intención de algunos interesados por «sacar rédito electoral» de la corrupción. «Hace falta más que palabrería, un eslogan o un charlatán para acabar con esta lacra que desangra la vida pública».