Puigdemont se estrena con desprecio hacia el presidente Rajoy
Puigdemont tras el pleno en el que oficializó su renuncia a la alcaldía de Gerona.
El nuevo presidente de la Generalitat dio una pista de lo que va a ser su pauta de comportamiento. Se estrenó con una muestra de desprecio a Mariano Rajoy y una promesa de lealtad a su antecesor, Artur Mas. Carles Puigdemont tomará hoy posesión del cargo para pilotar el proceso hacia la independencia en un plazo máximo de 18 meses, y tomará las riendas de la administración catalana, pero antes envió un nuevo mensaje de enfrentamiento al Gobierno central.
Si en el discurso en la sesión de investidura hizo más bien poco o nada para reconstruir los maltrechos puentes entre Madrid y Barcelona, ya que señaló que lo único que el Ejecutivo catalán tiene que negociar con el central es la proclamación del Estado catalán, además de asegurar que aplicará la declaración independentista suspendida por el Constitucional, ayer tensó aún más la cuerda entre las dos administraciones y en un tono casi desafiante despreció al presidente del Gobierno, pues vino a decir que no le interesa lo que diga Mariano Rajoy y que no tiene miedo de sus advertencias.
Puigdemont respondió así a las palabras de Rajoy, que el domingo garantizó que velará por el cumplimiento de la ley y que «no dejará pasar ni una» contra la unidad de España ni permitirá que nadie «se arrogue poderes ilimitados». «No me interesa lo que diga un proyecto que se acaba», afirmó el a partir de hoy presidente de la Generalitat. Mariano Rajoy, dijo, ostenta su cargo «en funciones y hace declaraciones en funciones». «Me interesa lo que diga el proyecto que tenga que venir, si es que tiene que venir alguno, porque de momento los deberes que hemos hecho en Cataluña en España aún no los han hecho», remató.