Nueve de las 103 residencias de mayores de León superan ya los cinco fallecidos

Lejos de la devastación que está causando el Covid-19 en las residencias de mayores de Madrid y Cataluña, la situación puertas adentro de las 103 instalaciones de este tipo que funcionan en León y que acogen a 7.534 personas es más estable. El problema se centra especialmente, según los datos de las consejerías de Sanidad y Familia, y hasta el momento, en nueve del centenar de esas residencias de la provincia, ya que cada una acumula más de cinco fallecidos.

El cómputo global de residentes leoneses que han muerto desde que la Junta empezó a contabilizarlos a mediados de marzo asciende a 134, de ellos 46 por coronavirus confirmado con un test y los otros 88 con síntomas compatibles con la enfermedad.

Con esos nueve centros más afectados, León encabeza la lista de 39 instalaciones de mayores en la autonomía que superan la ratio de cinco fallecidos y que registran entre todas el 60% de las víctimas. En concreto, 479 de las 793 muertes que se han producido en el sector en la Comunidad (332 contrastadas y 461 con síntomas compatibles). Detrás de León se sitúa Segovia con 8 residencias, Salamanca con 6, Valladolid con 5, Ávila, Burgos y Soria con 3 y Palencia y Zamora con una.

La Comunidad dispone de una amplia red de 1.214 hogares donde se alojan 46.638 abuelos y en 141 de ellos se ha producido alguna víctima desde que se desató la pandemia. La consejera de Familia, Isabel Blanco, quiso aclarar ayer que, aunque los datos no son halagüeños, el incremento de casos va siendo menor. En León, los positivos alcanzan a 97 ancianos, con 327 mayores que permanecen aislados con síntomas y otros 432 de forma preventiva.

Blanco también quiso matizar que entre el 80 y el 90% de los fallecidos con Covid-19 confirmado perdieron la vida en un hospital y no en las residencias. El doble confinamiento que sufren estas personas, aislados del exterior y de sus familias y, por orden estatal, desde hace una semana, con escasa movilidad en los propios centros al tener que permanecer en sus habitaciones, está generando nerviosismo en muchos mayores. Los más optimistas se entretienen con la televisión, la lectura y las cartas. Otros se encuentran más apagados, según reconocen los trabajadores de estas instalaciones. Desde la Gerencia de Atención Primaria de León se lleva un control de la situación de las residencias con una unidad de médico y enfermera que los visita por la mañana.

Nueva unidad y test

Vamos a añadir una segunda unidad seguramente la próxima semana para gestionar las necesidades que vayan surgiendo», explican.

También están pendientes de recibir los test de detección del coronavirus, «algo fundamental para empezar a realizar pruebas de forma masiva y saber quién lo ha pasado, quién no y quién está en ello». Esos test se espera que lleguen este fin de semana y que puedan empezar a repartirse. Funcionan con una gota de sangre y un reactivo que ilumnia tres tipos de rayas.

Por otro lado, la Junta, que ha intervenido ya tres residencias de ancianos desde que gestiona la crisis del coronavirus, una de ellas, la de Caboalles, aseguró ayer que sólo tomará esta decisión ante «situaciones excepcionales y de colapso», lo que negó que ocurra actualmente en más residencias. La consejera indicó que existe un contacto permanente con todas las residencias para aportar material o bien facilitar las contrataciones necesarias, por lo que sólo recurren a la intervención en caso extremo.

Esta medida supone, en primer término, el nombramiento de un nuevo director de la residencia que será un empleado público, y otras medidas asociadas que variarán en función de la situación de cada residencia. Blanco matizó que estas intervenciones son temporales y se limitan a la situación de colapso que se aprecie y que podrá ser revertida en el momento en el que la Consejería considere que puede ser viable la atención a los mayores por los propios medios de la residencia.

Preguntada por varios casos de residencias privadas que se encuentran supuestamente en una situación delicada por el incremento de contagios, explicó que desde ahora no va a aportar cifras concretas de cada una de ellas para cumplir la normativa de protección de datos, ya que así lo aconseja un informe de los Servicios Jurídicos de la Junta de Castilla y León, aunque añadió que ha trasladado esta situación al Gobierno central para afrontarla en el futuro.