El silencio de Rajoy sobre las listas electorales pone nervioso a los populares

El líder del PP, Mariano Rajoy, guarda el más absoluto silencio sobre las listas electorales para los comicios de marzo y se niega a proporcionar el más mínimo indicio de sus planes y del equipo con el que contará en la próxima legislatura. Esta incertidumbre no hace más que alimentar los temores de muchos sin confirmar las esperanzas de otros y fomenta el nerviosismo de casi todos, en especial, de los que disfrutan ahora de un cargo en el Gobierno o en las Cortes y temen perderlo con el cambio de líder en el partido. Será el ministro del Interior, Ángel Acebes, el encargado de confeccionar las candidaturas al Congreso y el Senado en su condición de presidente del comité electoral nacional del PP. Acebes, como en el 2000, no ostenta un cargo meramente representativo sino que ejerce su función con todas las consecuencias y Rajoy dejó en sus manos la difícil tarea de hacer compatible la paz interna con la confección de un grupo parlamentario homogéneo en cada una de las Cámaras. Lo mismo hizo Aznar hace cuatro años cuando descubrió lo cómodo que resultaba desviar al presidente del comité electoral todas las quejas y compromisos de dirigentes y cargos territoriales que querían colocarse o situar a su gente en las listas de las generales. «Habla con Ángel», les decía y ahora el nuevo candidato del PP repite la consigna. Pide tranquilidad Por el momento, Rajoy se limita a tranquilizar a los dirigentes que le transmiten su inquietud ante la posibilidad de cambios en las listas, pero no les da detalles de sus planes. Es requisito imprescindible que, antes de nada, mantenga sendas conversaciones con los vicesecretarios, Rodrigo Rato y Jaime Mayor, para tomar decisiones posteriores. El vasco dejará la política autonómica y Rato, en principio, apoyará la candidatura de Rajoy desde el segundo puesto de la lista de Madrid al Congreso. Pero Acebes sabe que debe tener muy presentes las elecciones europeas del mes de junio a la hora de hacer las candidaturas para las generales de marzo. Dirigentes cercanos a Rato aseguran que el vicepresidente primero del Gobierno se propone abrir una reflexión sobre su futuro después de mayo y decidir si concurre a los comicios al Parlamento Europeo. De ser así, los actuales eurodiputados se temen que Rato desembarque en las listas europeas con seis o siete personas de su equipo. Además, están convencidos de que el partido utilizará esta candidatura para colocar a otros pesos pesados que serán relevados en puestos de primera fila.