El estancamiento del empleo

Aportar políticas efectivas de empleo y estabilizar el mercado laboral son dos de los grandes retos que deberá afrontar el próximo presidente del Gobierno. La situación coyuntural no es la mejor, al menos en la provincia leonesa, donde la tradicional dinámica de estancamiento y envejecimiento de la población se agrava cada año. A finales de enero del 2004, 437.700 leoneses estaban en edad de trabajar (16 o más años), si bien 248.700 no tenían actividad laboral (jubilados) y sólo 174.400 estaban ocupados. En el paro se encuentran 19.810 leoneses, es decir el 10,48% de la población. Un último dato: el pasado mes se firmaron 9.495 contratos de trabajo y, de éstos, 8.697 tuvieron carácter temporal frente a los 798 indefinidos. La radiografía laboral de la provincia tiene su mejor exponente en el desempleo. La cifra de parados se fue reduciendo desde el año 95, pero volvió a crecer a partir del año 2002 en más de un 6,06%. Como también es tradicional, el desempleo ha aumentado en menor porcentaje que en España, no sólo por el hecho de que en León se han generado más trabajos ?los ocupados crecieron más despacio que en la nación?, sino también por un menor crecimiento en el número de personas activas. A pesar del mayor dinamismo de la contratación femenina ?casi todos los empleos netos generados en León fueron ocupados por mujeres?, el colectivo de parados se distribuyó de forma alícuota entre ambos sexos, lo que se asocia con la mayor movilidad de los activos femeninos de la provincia leonesa. A estas peculiaridades autóctonas, cada vez más se consolida el incremento de extranjeros residentes en lo que viene siendo una tendencia de los últimos años. Más de 3.000 inmigrantes cotizan ya a la Seguridad Social en León, aunque hay que destacar que todavía los índices de paro son mucho mayores entre este colectivo que entre la población leonesa. En cuanto a los jóvenes, aunque se incorporan más tarde al mercado de trabajo y con un mayor nivel de estudios, cada vez están encontrando más dificultades a la hora de acceder a un empleo por primera vez. Casi 3.000 jóvenes leoneses no han tenido nunca un contrato. La tasa de actividad juvenil fue del 55% en el 2003, seis puntos por encima de la tasa general. Del total de jóvenes asalariados, el 53% tiene un empleo temporal. Y en tal sentido destaca que los contratos por meses son casi la mitad en porcentaje cuando se habla de la población adulta. En León, el autoempleo es una vía poco transitada y la iniciativa empresarial queda reducida a unos porcentajes escasos que incluso es superada por los jóvenes que opositan para conseguir un empleo público. Por sectores económicos, el de servicio es el que más trabajo sigue dando en la provincia. Sólo como referente, a fecha de hoy hay más de 108.000 leoneses trabajando en este sector frente a los 67.000 que lo hacían en 1976.