Diario de León

Las ex senadoras expulsadas niegan que fueran a asistir a la asamblea de disidentes

Rajoy exige a Zapatero que no «compadree» con los dictadores

Moratinos califica como «inaceptable» la expulsión de los políticos e informadores

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r. n. | madrid
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El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, exigió al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que deje de «compadrear» con «dictadores bananeros» como los presidentes de Cuba y Venezuela, Fidel Castro y Hugo Chávez, y defienda los intereses de los españoles. Reaccionó así a la expulsión por parte del régimen de La Habana de más de una docena de políticos y periodistas europeos-entre ellos dos ex senadoras del PP y UPN-durante la celebración en la isla de una cumbre de disidentes. El líder popular hizo esas manifestaciones en un discurso que pronunció en Valencia ante la plana mayor del PP de la Comunidad Valenciana. Rajoy preguntó al jefe del Ejecutivo «qué tiene que decir ahora», sobre el régimen de Castro después de que expulsara de la isla a ciudadanos de países democráticos-entre ellos dos españoles-que iban a asistir al Primer Congreso Demócrata Cubano, organizado por la opositora Asamblea para Promover la Sociedad Civil. Rajoy afirmó que a los españoles «no les importan nada los abrazos con el señor Castro o con el memo de Chávez» y preguntó «dónde está escrito que España tenga que hacerse el simpático ante un tirano como Fidel Castro o ante un desequilibrado como el presidente de Venezuela, que está generando tensión en toda Suramérica». Los ataques a Hugo Chávez fueron la respuesta del PP a los insultos que éste le dedicó el viernes al ex presidente del Gobierno, José María Aznar, a quien calificó de «imbécil» y de «fascista», y le acusó de ser «peor que Hitler». Rajoy aprovechó para volver a cuestionar la política exterior del Gobierno por pedir en la Unión Europea que «se liquiden» las sanciones contra Cuba, que el PP consideraba «mínimas». Viaje privado Las dos ex senadoras españolas expulsadas, Rosa López Garnica e Isabel San Baldomero, aseguraron ayer que estaban en Cuba en un viaje privado y que no pensaban asistir a la reunión de disidentes. López Garnica afirmó que habían ido a La Habana «como ciudadanas particulares, con visados de turistas, y ellos interpretaron que habíamos ido al Congreso, por nuestros antecedentes políticos». Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, calificó el viernes de «inaceptable» la expulsión de los políticos e informadores, y convocó por la noche con carácter de urgencia al embajador de Cuba en España, Alberto Velazco San José, para pedirle explicaciones.

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