El único objetivo es el ascenso

León tenía la necesidad histórica de regresar a Segunda División. Tanto por entidad como por ciudad. Lo consiguió después de 43 años en el pozo de la tercera categoría del fútbol nacional. Recuperó su sitio en el balompié profesional, pero le duró sólo una temporada. Volvió de nuevo a un infierno que no le corresponde. León y Aspire han puesto a la Cultural en una rampa ideal para dar el salto a los sueños que anhela una afición que suele despertar con la pesadilla de seguir temporada tras temporada con sus deseos por cumplir.

Si Idiakez afirma que meterse en la Liga Pro, o mal denominada por la Federación Primera RFEF, es un premio para la Cultural, mal informado está del sentir de los leoneses para los que el culturalismo es una religión. Si así se lo encomendó como objetivo prioritario el representante de Aspire en León, seguro que no se ha puesto a valorar que la susodicha Pro no es más que la actual Segunda División B. León se ha gastado del bolsillo de todos sus ciudadanos un estadio y una ciudad deportiva para algo más que para jugar en tercera. Y Aspire tampoco se dejará engañar. Se hace el tonto, pero su dinero no lo es. Hay Mundial en Catar. Después, ya se verá.