Y turrón en agosto

Tendremos solemne procesión de Semana Santa en septiembre, lo nunca visto, y será cortejo cuidadísimo con macedonia de cofradías y veinte pasos resumiendo nuestras galas penitenciales. Por poca tropa, bandas, militares y autoridad civil o religiosa que vaya en cada paso, le caen al desfile dos kilómetros... u más. Esa procesión viene a santo de celebrarse aquí un congreso nacional de cofradías en el que se anuncia la presencia del Rey nuestro señor, don Felipe de Borbón y Grecia, al que rogarán además que puje un rato bajo algún paso, aunque ¿de dónde sacarán tantos braceros de su misma altura?; de lo contrario, o lo desloman o le esguazan la clavícula.

Esa procesión, vaciada de su ser y sentido con el nihil obstat de la autoridad religiosa, será sólo un simulacro y alguno creerá que es tan ridículo como poner villancicos en las playas o servir en agosto turrón y peladillas. Pero hay quien ve abrirse ahí un impresionante filón: ¡procesiones en verano!... Estúdiese. León sería la única ciudad española donde poder ver fuera de Semana Santa el folklore penitencial de encapuchados con capirote o verdugo y todo su despliegue de mitos, pitos y ritos de la España tridentina y teologal, la de fe ciega y penitente. A los extranjeros les llama mucho la atención este anacronismo que sin duda conocen porque por ahí lo enseñan cuando quieren asombrarse de nuestros barbarismos religiosos tan de barroca y teatral puesta en escena. Pero en verano, que es cuando vienen, no pueden ver procesiones, ni encapirotados, ni manolas, ni el colorista y festivo carnaval nazareno. Denles aquí esa oportunidad tan inédita como atractiva. La bomba sería. Publicítese e inunden redes y medios. No habrá guiri de mente curiosa, ociosa o dislocada que no deje la costa y se venga unos días a palparlo en vivo tronando aquí tamborradas y tararís desgañitados, mientras corren ríos de limonada matona y manda la luna estival en noches orujeras genarinas con despendole bendito e indulgencia penal. « León, parque temático de la Pasión ». Algún día lo veréis. Al tiempo.