Nieve en León (y es bueno)
Posible eslogan: campaña de nieves, campaña de bienes. El primer fin de semana, ya en clave electoral (había que utilizar esta expresión cuanto antes) se resumiría en un buen ritmo de actividad y contenido de los partidos y candidatos; o en demasiado poco de todo, incluso insustancial, esto ya para los muy cafeteros de la política. En definitiva, a gusto del consumidor. Lo otro que pasó fue que nevó. Importante. Esas imágenes en blanco de San Isidro y otras montañas de León, además de postal infalible, son el mejor reclamo de los pueblos recordando que están ahí todo el año. Sacan la bandera blanca de la esperanza, no de la resignación.
Camino por las informaciones generales y particulares y la principal conclusión también tiene dos vertientes. La campaña fluye como un mundo paralelo. ¿Será desafección o madurez sociopolítica española? Porque tan bueno es celebrar la suerte de vivir en democracia como evitar pasar demasiado tiempo en el espejo dándose gracias de haberse conocido.
Entre el toque de atención de a ver qué pasa con las pedanías, como cuenta Maite Rabanillo en la primera página de Elecciones 28-M, aquí en Diario de León, y lo de que Isabel Díaz Ayuso «está que se sale», que lo dice Alberto Núñez Feijoo, pasando porque José Luis Rodríguez Zapatero, nuestro presidente leonés, asegura que lleva participando treinta años en campañas («y lo que te rondaré», viene a decir), entre todos ellos cabe España, y mi correo electrónico...
Miro la bandeja de entrada con más idea de borrar que de leer y recuerdo lo sugerente que era el buzón real cuando se abría esperando y desesperando algo y seguía vacío. Me pregunto cómo se gestionaría aquella ansiedad de no tener más remedio que esperar al día siguiente. La Feria del Libro se acaba, dice un mail. Otro me lleva al imprescindible Félix García, experto en perros y razas leonesas. Hubo muchas citas culturales el fin de semana. E incluso me llega un spam del doctor Arnaldo informándome sobre mi proceso. La vida sigue por dentro y por fuera. Esta semana será de baile social y político. De campaña electoral pura y dura