Una amenaza de BA de difícil justificación

El planteamiento de BA Vidrio de buscar terrenos para llevarse la factoría del polígono de Onzonilla tiene un complicado encaje en estos momentos cuando hace apenas tres años recibió una importante subvención económica de la Junta para actualizar sus instalaciones en las que ni siquiera se incluía una ampliación del personal.

La ayuda pagada con fondos públicos tiene siempre su justificación como fórmula para colaborar a las empresas que cumplen una labor social relevante, en este caso a través de la consolidación de puestos de trabajo en una zona tan necesitada como es la provincia de León. Y en este contexto no parece justificable que en estos momentos BA Vidrio lance una amenaza tan contundente a sus trabajadores, en forma además de decisión del Consejo de Administración de la compañía de matriz portuguesa, cuando lo que se está buscando es un acuerdo en materia laboral.

Las dos partes, la empresa y los trabajadores, están obligadas a realizar un ejercicio de responsabilidad y de rigor para buscar un acuerdo. El momento económico es complicado para todos y el diálogo es el único camino útil para intentar paliar en lo posible los duros efectos de la crisis. No es el momento para posturas intransigentes que pueden llegar a poner en peligro el futuro de empresas tan importantes para León.

La amenaza de la compañía es hoy por hoy injustificable y lo que debe buscar es el diálogo eficaz.