EDITORIAL: La Comunidad pone la proa hacia el empleo

Los acuerdos firmados ayer entre el Gobierno autonómico, la patronal y los sindicatos servirán para movilizar más de 800 millones de euros hasta 2020 con un objetivo que debe ser prioritario en Castilla y León: la creación de empleo estable y de calidad.

La crisis que ha padecido España en los últimos años ha erosionado múltiples frentes en la sociedad, pero en el que las heridas se hacen más evidentes y con el riesgo de hacerse crónicas es en el empleo. Y por ello las instituciones están obligadas a centrar sus esfuerzos y sus recursos en otorgar una esperanza a esa serie de trabajadores que pertenecen a los grupos más vulnerables y en riesgo de exclusión porque no cabe duda que la mejor garantía para hacer frente a los problemas es la disposición de un puesto de trabajo.

En los pactos alcanzados ayer entre la Junta y los agentes sociales se plantean propuestas concretas en frentes como la Formación Profesional, las políticas activas de empleo, la prevención de riesgos laborales, la igualdad y conciliación, o las ayudas para el alquiler y la rehabilitación de viviendas. Fórmulas para impulsar la actividad económica, y que deben convertirse en un punto de partida y no en un fin en sí mismo, como se puso ayer de manifiesto durante el acto celebrado en Valladolid.

En Castilla y León hay en estos momentos 200.000 parados y la cifra es totalmente inaceptable. La II Estrategia Integrada de Empleo, Formación Profesional, Prevención de Riesgos Laborales e Igualdad de Conciliación en el Empleo intentará llevar esa cifra hacia un nivel más bajo. Pero de manera paralela deben mantenerse activas todas las medidas paliativas que han sido puestas en marcha para ayudar a esas personas que sufren la crisis de una forma más directa, hasta que puedan recuperar una situación razonable.