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Carta abierta a la alcaldesa de San Andrés

D ecía usted en el Diario de León a principios del pasado año que se construirían pasarelas sobre las vías del tren en el plazo de un año para que ambos municipios, León, y San Andrés, fueran más permeables; entre otras en el camino de la Raya, cuya foto aparecía en la prensa. Yo la decía entonces, en este mismo diario que lo veía muy lejos en el tiempo; pues era un año que ya van para dos; y le pedía con humildad, que arreglara el camino —por cierto muy transitado—, porque cuando llueve no se puede pasar por él.

No se trata del coste, porque uno o dos camiones de grava sobrarían; entonces si es posible dígame por qué no se hace, pues se trata de lo mismo que han hecho en otros caminos de la zona.

Antonio Marcos

Barreñada. león

Fraternidad

D e acuerdo con el Diccionario español, Fraternidad significa lo siguiente: «Unión y buena correspondencia entre hermanos, o entre los que se tratan como tales».

Hoy día poca voluntad existe para llevar a cabo esta unión, y más con lo acontecido socialmente (me refiero al caso Gürtel, las tarjetas opacas, los ERE, la Púnica) pero gracias a Dios, puede decir que no todo es deficiente. Me explicaré, ya que lo que en definitiva deseo decir es lo siguiente: Villabúrbula es un pueblo de 63 habitantes censados, sito a una veintena de kilómetros de León. Su alcalde pedáneo (Carlos), junto con Nati y Pedro Luis, pertenecientes a la comisión, han contactado con un clérigo (don Gregorio) para celebrar los domingos veraniegos, a las 12 horas, la Santa Misa. Este sacerdote se tiene que desplazar unos 30 kilómetros desde donde reside en la comarca de los Oteros.

Al finalizar la misa, Carlos, Nati y Pedro Luis, junto con los asistentes, organizamos un vino español, con lo cual se utilizan bancos, meses, que se sacan del porche e iglesia, así como las chuches, refrescos, cerveza y vinos, que se instala todo en la plaza de la Iglesia.

Ni que decir tiene, la satisfacción de los vecinos de poder comentar los problemas normales que todos tenemos, y al propio tiempo hacer gala de las degustaciones gratuitas, que la comisión proporciona. Yo me admiro de las personas mayores (don Upe, 100 años, doña Lourdes 90, doña Virginia 92, Chucha 92, y varias personas de edades octogenarias, entre las que me incluyo yo, 84 años).

Es para mí una ilusión poder comentar este acontecimiento, debido a la inestabilidad social que existe ahora, y al propio tiempo dar las gracias a la comisión y a los asistentes, por el ejemplo de fraternidad que hemos dado.

Álvaro López Gómez. Villabúrbula

Una calle para Calimeria

D el Pleno del 24 de octubre en Fresno de la Vega quería destacar la intervención que, en el turno de palabra abierto por el alcalde hizo, de forma pausada y brillante, Carmen Fernández Marcos en el que fue desgranando una serie de propuestas para la mejora del pueblo. Resumo alguna de ellas:

Comenzó sugiriendo la conveniencia de celebrar los plenos municipales a las doce de la mañana para que de esta manera asistiera más gente, pues siempre es enriquecedor oír ideas que diversas personas pudieran aportar.

Después expuso una serie de razones por las que una vez que la Feria del Pimiento está consolidada (hizo el número 33) ha llegado el momento de que ésta adquiera la denominación de Feria de Interés Turístico Provincial, pues nuestra seña de identidad como es la del pimiento morrón así lo exige, por lo cual pide a la corporación que comience a trabajar acudiendo a todos cuantos organismos se necesite para conseguir esta denominación. En este punto aprovecha para decir que como a la feria acuden una serie de invitados a los que se obsequia con un ágape, habría que buscar la manera de rentabilizar los gastos que ello origina y nada mejor que en la mesa estén presentes los productos propios de la huerta.

Luego aporta una serie de ideas sobre las medidas que se podrían tomar con el objetivo de fijar población joven en el municipio.

Finalmente hace la propuesta de que a la placita enfrente a la iglesia, al lado de la casa donde vivió Calimeria Montiel Marcos lleve su nombre. De doña Cali hemos visto en la prensa varios reportajes, el último hace unos días de la periodista de ese Diario Ana Gaitero. Fue una mujer adelantada a su tiempo; tuvo el honor de ser la primera mujer que escribió para el Diario de León como también lo hizo en las revistas de Educación; trabajadora y luchadora infatigable se esforzó por extender el saber y la cultura como arma de progreso que siempre pedía para su pueblo, al que citaba con frecuencia en sus escritos. Comenzó su vida profesional como maestra de Valdoré y con casi cincuenta años de ejercicio se jubiló a los 70, los veinticuatro últimos como regente (hoy directora) de las Escuelas Anejas de Prácticas a las Escuelas del Magisterio de Madrid y Segovia.

Ahí quedó la propuesta, ahora la corporación municipal tiene la última palabra.

Gerardo Pérez López. león

31 de octubre,

día del docente

Q uiero manifestar mi admiración y respeto hacia todo el cuerpo docente (mujeres y hombres) que de forma silenciosa, día a día, intentan formar a las nuevas generaciones que, en su mayoría, desde los distintos ámbitos y puestos de trabajo, van a hacer que esta sociedad avance y sea cada día más justa, que es tanto como decir más honesta. Debo reconocer mi especial inclinación hacia este honorable colectivo ya que a él perteneció mi padre, algunos hermanos, y al que siguen vinculados amigos y amigas a quienes aprovecho para felicitar, felicitación que hago extensiva a todo el profesorado.

Mi reflexión surge de una situación que he vivido el pasado lunes, 31 de octubre. Cuando salí por la mañana y con personas que aleatoriamente coincidí, pregunté (con cierta intencionalidad) por qué hoy no tenían clase los niños (chicos y chicas). La respuesta mayoritaria fue (un 80%) «que habían hecho puente coincidiendo con que el día de los santos era martes» (sólo a algunos les sonaba como que era el día del profesor, del maestro, o algo así).

Ello me produjo una revolución interna al recordar la profusión de imágenes, discursos y otras representaciones que tenían lugar en fechas, algunas recientes, como la celebración del «día de las fuerzas armadas», «de la abogacía» o de otras, como la propia de cada profesión o gremio.

Mi pregunta es ¿no se merecen los profesionales de la enseñanza, de la educación en términos genéricos, que desde las instituciones del Estado, de la Comunidad, de la provincia y de la localidad se dedique una jornada a su reconocimiento?

Espero y deseo, respetados mandatarios de las instituciones que regentáis, que en el futuro se consensúe un Día del Docente (que no esté entre fiestas) para que realmente se pueda dedicar este día al enseñante, al educador, al maestro, al profesor, al docente, a la Educación; y los usuarios y sociedad en general sepan, por los actos que se celebren, que no es un día de puente, sino de reconocimiento a una labor que día a día realizan estos profesionales.

josé luis santos cela. león

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