Profetas

POR si no bastara con la ralea de videntes, pitonisas y sujetos de semejante calaña que parecen haberse adueñado de la televisión española, ahí tenemos al Ministerio de Medio Ambiente anunciando a bombo y platillo la declaración como Reserva de la Biosfera del Parque Natural de Picos de Europa y el valle de Laciana, honorífico galardón supuestamente concedido por la Unesco. Lógicamente la consejera de la Junta de Castilla y León, Silvia Clemente, declaró a bote pronto sentirse «orgullosa» de tan alta distinción, sentimiento de autocomplacencia que apenas le duró 24 horas. Y es que, según se supo luego, tal distinción era un error o falsedad surgida desde el ministerio, imaginada al parecer por algún político sobrado de verborrea y que, por decirlo en palabras llanas, estaba flipando por un tubo. Lo burdo de la maniobra ha propiciado que toda la oposición se lance al cuello de los responsables populares, quienes han entrado en los últimos tiempos en una campaña pre-electoral que presenta visos de ansiedad casi olvidados por estos lares. Sea como fuere, resulta evidente que esta Babel de falsas titulaciones provoca un sentimiento de frustración en la decaída provincia leonesa, harta de promesas tan fuera de lugar como un enterrador en una fiesta de cumpleaños. Así que dejémonos de dulces fábulas y vocaciones proféticas tan poco fiables, pues según escribió el inglés Kipling, tan versado en engaños y embelecos, las cosas solamente terminan cuando terminan bien.