tras el informe de la CIDH sobre esta cuestión
España reitera su compromiso con la abolición de la pena de muerte
El Gobierno español ha acogido "con beneplácito" el informe sobre pena de muerte publicado la semana pasada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y ha reiterado su "firme compromiso" con la abolición de este tipo de castigo, que ha calificado de "cruel, inhumano y degradante".
El informe de la CIDH, un órgano adscrito a la Organización de los Estados Americanos (OEA), contiene recomendaciones para la abolición de la pena de muerte o la aprobación de moratorias, al tiempo que plantea la obligación de respetar las restricciones y limitaciones establecidas en los instrumentos regionales de Derechos Humanos.
España, en calidad de Estado observador, ha venido apoyando "firmemente" la labor de la OEA y del sistema interamericano de Derechos Humanos, ha explicado el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación en un comunicado.
Las autoridades españolas mantienen un "firme compromiso a favor de la abolición universal de la pena de muerte", por considerarla "un castigo cruel, inhumano y degradante, contrario a la dignidad del ser humano". Además, según Exteriores, la pena capital carece de efectos disuasorios probados y tiene "consecuencias irreparables" en el caso de que se produzcan errores judiciales.
España trabaja en el seno de la ONU, junto a la Unión Europea y otros aliados, "por conseguir el mayor apoyo posible a la causa de la moratoria universal". En junio de 2013 se celebrará en Madrid el V Congreso Mundial contra la Pena de Muerte, organizado por la ONG Ensemble contre la Peine de Mort (ECPM), con el apoyo y copatrocinio del Gobierno español.