Los tres años del gran reciclaje tecnológico en León

Los leoneses hicieron el gran reciclaje tecnológico de luminarias y lámparas halógenas para pasar a LED en sus viviendas y empresas en 2008, 2013 y 2016, tres señalados en las estadísticas de la Asociación para el Reciclaje de la Iluminación (Ambilamp). Las empresas y los domicilios leoneses hicieron un gran cambio tecnológico. Esa actualización se refleja en la basura reciclada en luminarias que sumaron 26.531 kilos en el año 2013 y otros 12.273 kilos en 2016. «En esos dos años se hicieron en León dos grandes cambios de tecnología, lo que supuso un aumento de reciclaje», explican desde Ambilamp, que desde el año 2013 ha reciclado en León 50.615 kilos de residuos de bombillas en León. La asociación también atribuye a la durabilidad del bajo consumo LED la caída del 80% re reciclaje del último año, tras pasar de los 12.273 kilos en el 2016 a los 4.994 del 2017. Este cambio de tecnología también se nota en el reciclaje de las lámparas que tuvo su auge en León en el año 2008. Ese año se reciclaron en León 90.509 kilos de lámparas, cantidad que se estabiliza a la baja en el año 2017 con 10.265 kilos. León ha generado 226.978 kilos de lámparas para reciclar desde el año 2007.

Los leoneses se ponen al día para cumplir con la legislación ante la entrada en vigor de la normativa europea que prohíbe la comercialización de halógenos a partir del 1 de septiembre, aunque los establecimientos podrán vender los que tienen en el almacén hasta agotar existencias. Desde la Asociación de Fabricantes de Iluminación (Anfalum) calculan que en la mitad de los hogares hay todavía halógenos que ya no se pueden reciclar desde el 15 de agosto tras la entrada en vigor del Real Decreto de 20 de febrero de 2015. Se trata de la segunda parte de una medida que comenzó a aplicarse en 2016 con las restricciones en la comercialización de focos halógenos.

Lo que se puede y no se puede reciclar

Las lámparas que se reciclan son los fluorescentes, las bombillas de bajo consumo, las de descarga y las bombillas LED. Quedan excluidas las lámparas de incandescencia y las halógenas. En cuanto a las luminarias, hay que reciclar tanto las de uso exterior como las de interior, además de las de emergencia, los rótulos luminosos y las luminarias LED.

El portavoz de Amfalum, Ricardo Pomata, destaca que las lámparas halógenas podrán utilizarse solamente en aplicaciones especiales en las que no haya sustitutivos viables como ocurre en los frigoríficos y los pequeños electrodomésticos. «La utilización de lámparas LED reduce un 50% el consumo en electricidad y si se cambia todo el sistema de gestión el ahorro puede llegar al 80%».

Las lámparas halógenas dejarán de venderse en Europa pero los fabricantes podrán mantener la producción siempre y cuando comercialicen los productos fuera de la Unión Europea.

Destino de los reciclado

Todos los elementos de las lámparas y las luminarias se reciclan. El vidrio se destina a la fabricación de frascos, asfalto y cerámicas. Los metales se utilizan nuevamente en la industria siderúrgica en la fabricación de cualquier objeto de metal. El plástico se reutiliza a cualquiera de las múltiples aplicaciones de plástico reciclado y el mercurio se almacena en condiciones de seguridad, informa la empresa de reciclaje.

En el año 2017, Ambilamp recogió para su reciclaje 2.649 toneladas de residuos de lámparas y 1.779 toneladas de luminarias en toda España. Desde el año 2005, año de la fundación de Ambilamp la asociación registra un acumulado de 23.000 toneladas recicladas de lámparas (más de 174 millones de unidades) y desde el año 2012, el que comenzó a recoger residuos de luminarias, ya contabiliza 4.888 toneladas recicladas.

Entre enero y febrero de 208, ha recogido para su reciclaje 468 toneladas de lámparas y 400 de luminarias, de las que 227 toneladas de lámparas y casi 51 de luminarias proceden de la provincia de León.

Por comunidades

Cataluña es la comunidad autónoma con más residuos reciclados con 564 toneladas en 2017, seguida de Madrid (419 toneladas) y Andalucía (334). Las comunidades con más incremento de residuos para reciclar son Murcia (+29%), ciudad autónoma de Ceuta (+13,3%) y Asturias (+7,7%).

En el caso de los residuos de luminarias, la comunidad autónoma de Madrid, con 304 toneladas (+48% en comparación con 2016) es la que encabeza la lista, seguida de Cataluña con 287 toneladas (+81%) y el País Vasco con 196 toneladas (+54%). A pesar del ascenso que presentan estas tres comunidades, son Cantabria (+499%), la Ciudad Autónoma de Melilla (+346%)y Asturias(+337%) las que registran un aumento porcentual más significativo—a las que habría que unir los datos registrados en la Ciudad Autónoma de Ceuta donde en 2016 no se llegó a los 1.000 kilos de luminarias recogidos para su reciclaje—y en 2017 ya se han registrado más de 3,3 toneladas.

La asociación cuenta con 300 productores adheridos y más de 35.000 puntos de recogida en toda España. Desde este año el reciclaje se amplía a actividades de diferentes subsectores del material eléctrico.