La red global de Jesuitas crece con fortaleza
La Compañía de Jesús apuesta por una
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Con el nuevo curso dando sus primeros pasos, desde el Colegio Jesuitas de León tienen claros los retos que se presentan «en un momento en el que la sociedad está muy secularizada. Una sociedad utilitarista y superficial, muy plural, donde el valor de lo religioso y la fe es muy reducido», remarcan desde la dirección. «Cambios culturales, legislativos y de costumbres de enorme calado en los que no hay una respuesta clara, en la que el deterioro y descrédito de la democracia van de la mano».
En ese escenario la Compañía de Jesús tiene una respuesta clara y eficaz para garantizar la mejor formación de sus alumnos. Desde hace tiempo vienen apostando por una red de centros cada vez más cohesionados. Cuenta con más de 4 siglos y medio de experiencia basados en la Pedagogía Ignaciana cuya clave es enseñar a pensar y a aprender. «Colegios abiertos que ofrecen a la sociedad una clara inspiración cristiana y un modelo de educación liberadora y humana».
Disponen de 69 centros educativos donde estudian alrededor de 75.000 alumnos de forma presencial y 100.000 alumnos son educados online a través de Radio Ecca. Una educación que se extiende por el mundo donde los alumnos se forman independientemente del lugar o su situación.
En la actualidad Jesuitas se enfrenta a diez importantes retos: un compromiso con ser católicos y ofrecer formación profunda en la fe en diálogo con otras religiones y visiones del mundo; los colegios jesuitas tienen el firme compromiso de crear un ambiente seguro y saludable para todos y también están comprometidos con la sociedad en general.
Asimismo están comprometidos con el cuidado de la creación. «Muchas cosas tienen que reorientar su rumbo, pero ante todo la humanidad necesita cambiar. Hace falta la conciencia de un origen común, de una pertenencia mutua y de un futuro compartido por todos. Esta conciencia básica permitiría el desarrollo de nuevas convicciones, actitudes y formas de vida. Se destaca así un gran desafío cultural, espiritual y educativo que supondrá largos procesos de regeneración».
Otro de los retos de la Compañía de Jesús son el compromiso con la justicia; con ser accesibles para todos; con la interculturalidad; con la red global al servicio de la misión; con la excelencia humana y con el aprendizaje de por vida.