EL EGO DE CRISTIANO
Sigue batiendo plusmarcas, como la de ser el único jugador de la historia capaz de marcar en cinco fases de un Mundial de Fútbol pero Cristiano Ronaldo no acepta que hace tiempo que ya superó el punto de inflexión de su magnífica carrera
Tras mantener un pulso interno y mediático en el Manchester United con el técnico nerlandés Erik ten Hag que ha llevado al final al astro luso a rescindir su contrato con los ‘red devils’, Ronaldo convirtió la concentración del combinado de su país en el Mundial de Catar en un polvorín. Y, lo que es peor, lo hizo en las horas previas al choque de octavos de final frente a Suiza.
La guerra con su veterano entrenador, Fernando Santos, incendió la concentración portuguesa. Más allá de los típicos gestitos en el campo del crack de Madeira, que apuntan casi siempre a un compañero por no pasarle un balón o no advertir un desmarque o al técnico por la forma de jugar de los lusos, el brote surgió por la actitud del futbolista al ser sustituido en el choque contra Corea del Sur.
«Tienes una prisa del carajo para echarme, ¡jódete!!». Fueron las palabras que Cristiano escupió contra su seleccionador cuando fue sustituido.
La escena fue emitida con bastante lujo de detalles por la televisión portuguesa y se aireó aún más cuando un enviado especial de la cadena lusa acudió a una conferencia de Fernando Santos para preguntarle por ese incidente. No le guestó nada la actitud de la estrella.
La presencia de Ronaldo, de 37 años, en el once inicial es un tema controvertido entre los aficionados portugueses.
El ego y la desmesurada ambición de Cristiano no tiene límites y le impide llevar con naturalidad las limitaciones físicas y el desgaste que conllevan sus 37 años y una carrera tan dilatada y exitos. Tras ser el primero en marcar en cinco Mundiales, ahora le obsesiona batir el récord de su compatriota Eusebio en el gran evento planetario. El legendario delantero luso, ya fallecido, anotó nueve tantos en la Copa del Mundo de Inglaterra’96.
Cristiano, que suma ocho contando todas sus presencias mundialistas, desea al menos uno más para igualar al otro gran mito en la historia del fútbol de su país y no entiende de descansos, ni de minutos de la basura. De ahí que jurase en hebreo al no estar ya en el campo. Santos lo dejó en el banquillo hasta la segunda parte.
Las críticas hacia Santos se han multiplicado, y no solo por parte de los aficionados o de los admiradores de Ronaldo.
La pareja del crack portugués, la modelo española Georgina Rodríguez, criticó la decisión del seleccionador por «subestimar al mejor jugador del mundo».
«Hoy tu amigo y entrenador decidió mal. Ese amigo para el que tantas palabras de admiración y respeto tienes. El mismo que al meterte en el juego vio cómo cambió todo, pero ya era tarde», publicó Georgina en un mensaje en Instagram acompañado de una imagen de Cristiano tras la derrota.