Las restricciones en León por el covid fueron muy eficaces

El confinamiento, las limitaciones de aforo y todas las medidas de control social tuvieron una eficacia ‘alta’ en la provincia de León. El incremento de las restricciones redujo la transmisión del coronavirus en un 22 semanal, que el 31 de marzo de 2020 —un mes después del primer contagio en la provincia— ya había infectado en León a 918 personas y causado 89 muertes. El estudio del Comité Español de Matemáticas (Cemat), en colaboración con el Instituto de Salud Carlos III y el Ministerio de Sanidad, concluye que León es la quinta provincia de España en la que más eficaces fueron las limitaciones, un ránking que lidera Granada y sitúa a Madrid a la cola.

La investigación de varios centros españoles, liderada desde el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), aporta nuevos datos que confirman que el incremento en las restricciones impuestas para el control de la pandemia se asoció a una reducción importante en la transmisión de la covid-19 en España. Los resultados se publican en Frontiers in Public Health .

Los resultados señalan que las medidas adoptadas en materia de distanciamiento social y restauración son eficaces, sobre todo en interiores, mientras que el efecto es menos evidente para otras, como las que afectan al ocio y a la cultura, a los lugares de culto, a las celebraciones religiosas o a la práctica deportiva en interiores.

«En conclusión, nuestros resultados indican que el aumento de las restricciones tuvo un efecto considerable en la disminución de la transmisión del Covid-19, y las intervenciones en distancia social, bares y restaurantes tuvieron un efecto mayor y más consistente. Nuestros resultados pueden contribuir al corpus de evidencia que ayudará a informar decisiones futuras en respuesta al resurgimiento de del coronavirus o a futuras pandemias. Sin embargo, la mortalidad y la morbilidad prevenible mediante la implementación de las medidas también dependerán de la gravedad de las infecciones evitadas, que debe equilibrarse con los posibles efectos negativos. La asociación y la colaboración continuas entre los epidemiólogos de la administración pública y los científicos, en particular los matemáticos y los científicos de datos, son cruciales para garantizar un análisis adecuado y oportuno de los datos que se pueden utilizar para recomendaciones basadas en evidencia», concluyen los profesionales en la publicación del estudio.

El estudio se llevó a cabo durante ocho meses y tres olas epidémicas, con medidas intermitentes en 50 territorios, «lo que proporcionó un rico experimento natural». Los científicos concluyen que no hubo cambios significativos en las recomendaciones de pruebas y vigilancia, lo que hace que la serie temporal sea confiable. «Además, muchos factores culturales, socioeconómicos y otras variables contextuales son compartidos por los territorios, siendo más homogéneos que las comparaciones internacionales, y facilitando la atribución de diferencias a lasrestricciones».