Diario de León

Cooperactiv@s: «En León vivimos mucho de la queja y hay que activar la cooperación»

María Ramón es la cara visible de una red para generar sinergias y proyectos en común hace casi una década y que apuesta por la economía social y solidaria para fortalecer una provincia en declive.

RAMIRO

RAMIRO

León

Creado:

Actualizado:

María Ramón es la cara visible y Marisa Rodríguez la presidenta de Cooperactiv@s. El equipo es mucho más. Nacida en 2014 como red informal de Ulecoop, la Unión Leonesa de Cooperativas, fue primero una red informal y con el tiempo se convirtió en asociación. Pero más allá de las formas, lo que importa es el contenido.

«Cuando nacimos queríamos que fuera una red de particular, asociaciones, ayuntamientos, empresas... para generar sinergias y proyectos en común, una red en beneficio mutuo», comenta Ramón. En Ulecoop vieron la necesidad de que la economía social y solidaria saltara las barreras del cooperativismo. «Hay personas con principios y valores de la economía social que no pueden constituirse en cooperativas, como las autónomas, y queríamos que empezaran a juntarse», añade.

La crisis económica y la caída de muchas estructuras organizativas dio un empuje mayor a la iniciativa en aquellos tiempos posteriores al 15-M. «Pensábamos que había que confluir y no esperar a que fuera la administración u otra entidad ajena lo hiciera por nosotras», señalan en Cooperactiv@s.

León sostenible

«Participamos en la creación de la marca de la Diputación a partir de 12 grupos de trabajo en el territorio en pandemia»

En aquellas épocas «apenas se hablaba de red» y vieron la «necesidad de unirse viendo las necesidades de las necesidades de las personas sin tener no sólo el cuenta el tema crematístico». Actualmente la radiografía de Cooperactiv@s, aparte de ser una asociación sin ánimo de lucro, integra a 31 entidades, personas e instituciones en torno a esta idea de que la unión hace la fuerza.

La Asociación de Municipios Mineros, Amulemer, Zardinas, Lughan, como entidades asociativas; Social Soluciones o Del Monte de Tabuyo como empresas; el Ayuntamiento de Villagatón como institución y personas que trabajan como autónomas como la psicóloga Ana Badiola, la veterinaria y nutricionista Elena P. Rueda o Ricardo Valderrama, la agente de igualdad Carmen Fernández LLamazares, entre otras, la trama de esta red que trabaja por la economía social y solidaria en León.

Modelo de éxito

«La economía social está en el mejor momento desde los años 90 y es el avance para lo que puede ser Europa»

La red no se queda en León. Cooperactiv@s forma parte de Reascyl y a su vez de Reas (Red de Economía Alternativa y Solidaria). Como ejemplo de la generación de proyectos conjuntos y fusión de sinergias comentan el proyecto formativo llevado a cabo en Villamañán y San Justo de la Vega por Elena P. Rueda y Ricardo Valderrama, de Naturgeis, centrado en los valores nutricionales y el cultivo de legumbres y frutos secos como elemento de crecimiento sostenible y alimentación saludable.

El kit digital que han difundido desde Cooperactiv@s para las empresas es otra vertiente del impulso del desarrollo rural y el sector primario a través de las TIC. Desde el primer momento, la red ha tenido el respaldo de la Uned, con la que desarrollan diversas actividades. La psicóloga Ana Badiola, experta en liderazgo personal, ha impulsado a través de la red la formación de mujeres a través de talleres grupales con la máxima de «atrévete a ser quien eres y poder llegar a muchos sitios». Aparte de la amplia participación de mujeres en esta red, la perspectiva de género está presente en todas las acciones que desarrolla.

Cooperactiv@s es una plataforma para poder visibilizar lo que hacen las personas y entidades que la integran, entre ellas y hacia fuera. A través de sus socios realiza labores de acompañamiento a personas que quieren iniciar un proyecto o negocio. Es el caso de la cooperativa Tera Viva, en Zamora, una iniciativa que se desarrolla en una hectárea de terreno y cuya base es el cultivo de plantas para infusiones ecológicas.

Una iniciativa novedosa que están llevando a cabo para reforzar las sinergias son los bonos de servicio. Son bonos de formación que ofrecen los socios y socias de Cooperactiv@s que van desde el descuento del 10% para el curso online Inspira. Comunicación Eficaz de Ana Badiola, al del 30% por la traducción de las 40 preguntas básicas que ofrece Iciar Martín Aresti, la impulsora de Añino Merina, que además es geógrafa y especialista en economía social y sostenible.

El veterinario Javier Mateo Oyagüe ofrece pequeñas investigaciones sobre procesos o calidad de alimentos, solo a cambio de los costes de los materiales y desplazamientos cuando sea necesario. El comedor Del Monte de Tabuyo tiene bonos del 10% en todos sus productos y en el restaurante. Mauricio O’Brien a través de Nanoma apuesta por generar servicios y dar apoyo a las empresas, entidades o iniciativas individuales que requieran de su asesoramiento o implementación en diversos campos, como la comunicación y el diseño... Teresa y Cecilia con su empresa de economía social Solucionan2 ofrecen el 8% en sus servicios de gestiones, recados o acompañamiento al médico. Begoña González también ofrece asistencia personal para personas en situación de dependencia. En www.cooperactivas.com/bonos se puede encontrar toda la oferta de descuentos.

«Participamos también en la creación de la marca León sostenible de la Diputación. De hecho, la iniciativa salió de Cooperactiv@s», explican. Fue durante la pandemia, se crearon 12 grupos online con la idea de trabajar en el territorio con todo tipo de agentes. A partir de las conclusiones se hizo una radiografía de necesidades, oportunidades, fortalezas y debilidades de la provincia.

Ahora es la Diputación la que pone el marchamo. «La idea era generar economía no depredadora dentro del territorio y contando con las personas», apuntan. «Estamos muy orgullosos de ese trabajo que alienta a generar acciones y proyectos basándose en la marca», subrayan.

También cuentan con una comunidad de préstamos parabancarios —ayudas reintegrables— para el fondo de emprendimiento, como los 6.000 euros que aportaron para ayudar a un proyecto de Burgos a recuperar una raza autóctona de caballos. La vinculación con Ulecooop y con la Asociación de Finanzas Éticas impulsa estos apoyos al emprendimiento, que también se reflejan con su presencia en la Feria de Emprendedoras de Villaquilambre, que tendrá lugar los días 15, 16 y 17 de diciembre.

Una economía en la que «todo el mundo pueda participar y tenga en cuenta a las personas» es el ecosistema que quieren ayudar a crecer. «En León hay que crear conciencia de que hace falta la unión, que hacen falta redes de personas y de proyectos, caminar juntos», inciden. El ejemplo más cercano lo ven en el sector del vino, cuyo éxito se basa «en las alianzas que crean sinergias para apoyarse».

Unión difícil

«A las mujeres les cuesta mucho más asociarse, tienen mucha resistencia. Hay que acompañar y apoyar»

Una red, además, «genera orgullo de pertenencia y conciencia de que puedes hacer y cambiar cosas sin necesidad de esperar a que los demás lo hagan por ti». «Se trata de ir desde lo individual a lo colectivo y desde ahí te aúpas para desarrollar tu entorno», explica María Ramón.

Otra de las dimensiones de trabajar conjuntamente «es que trabajas a favor y no en contra. Juntas podemos hacer cosas y superar el individualismo que nos ha generado modelos no cooperativos». «León tiene que entender que necesitamos unirnos; si no, no vamos a ninguna parte. Vivimos mucho de la queja y hay que activar la cooperación». El individualismo y la práctica de aferrarse a la ‘parcelita’ propia «tenderán a desaparecer» si se quiere sobrevivir porque «pensar en otros y en el bienestar es la clave del desarrollo». Defienden que «lo micro en unión puede ser muy grande», algo que debe aprender incluso la administración pública o en la agenda política que «piensa en lo macro y cortoplacista, que traen grandes ‘paracaidistas’ a la economía que luego se van».

Cooperativ@s tiene entre sus objetivos inocular la idea de la cooperación entre lo público y lo privado mirando más por el territorio. «España está construida con un tejido empresarial micro y no se le está dando la importancia que tiene», advierten. La ley 5/2011 considera que la economía social la promueven cooperativas, centros especiales de empleo, sociedades laborales, empresas de inserción y cofradías de pescadores. «Nosotras le damos una vuelta y sumamos economía social y emprendimiento autonómo o sociedades limitadas de personas que trabajan bajo los mismos valores que la economía social», señalan.

Formación con descuento

«Tenemos bonos socios y socias ofrecen con descuentos en productos y servicios como formación»

Tener en cuenta a este sector es básico. «España no se puede sostener exclusivamente con el sector servicios. Necesitamos sectores productivos para que luego funcionen los servicios», añaden. Para avivar la economía «hace falta mente abierta y mirar más allá de la pared», aunque son conscientes de que «cuesta y hay mucho miedo».

Esto es algo que observan con más preocupación entre las mujeres. «Les cuesta asociarse, tienen mucha resistencia». «Hay que reforzar a las personas que están en el camino, que sientan que se les apoya», subraya Ana Badiola en este punto, siempre conectada a su dimensión de sembradora de liderazgo. Que las personas tomen conciencia de que «estar en otros sitios es una manera de contribuir a que no se encasille todo en una perspectiva. Las voces discrepantes también ayudan a progresar», recalca Badiola. Para esta psicóloga «todas las personas un valor que dar». Y, como añade María Ramón, «en esta vida hay que ser protagonistas y no solo espectadores».

Lo que hace Cooperactiv@s desde León, también unida a las finanzas éticas, es el rumbo del avance económico de lo que se trabaja en Europa. «La economía social está viviendo el mejor momento desde los años 90», subraya Ramón. Así ha quedado constatado en la Conferencia Europea a la que asistieron recientemente en San Sebastián.

La ciudad vasca ha sido designada capital española de la economía social por sus acciones en favor de una economía más justa, igualitaria, integradora, participativa y que pone a las personas en el centro. Son las señas de identidad de la economía social. «Generamos actividad económica pensando en las personas, que participen en la toma de decisiones y que no sea el capital externo. Son las personas, la democracia, la participación y el trabajo en equipo», argumentan.

El objetivo es la búsqueda de bienestar, con respeto al medio ambiente, al entorno y a las personas. La economía social tiene tres niveles: que sea viable económicamente, socialmente y ambientalmente. Estos principios hacen que «no estemos a favor de la industria extractiva y de los proyectos macro» ya sean de tipo energético o ganadería industrial.

María Ramón y Marisa Rodríguez se conocieron en la época de las cooperativas textiles que cayeron cuando en los años 90 se retira el apoyo al sector. En Tabuyo del Monte, las mujeres afectadas buscaron otras fórmulas y nació la iniciativa Del Monte de Tabuyo impulsada por cinco mujeres en 2003. «En el medio rural no nos valen los trajes pret a porter», señala. Aquellas experiencias fueron una escuela sobre la que se han ido construyendo nuevos proyecto y ampliando la red. La idea es que crezca y se haga más fuerte.

tracking