Astronautas comerciales
Cuatro ingenieros se forman esta semana en Burgos en altas gravedades y supervivencia

Entrenamientos de astronautas en Alemania, con pruebas similares a las de Burgos.
Cuatro ingenieros se forman esta semana en Burgos en altas gravedades con sesiones de vuelo, prácticas químicas y biológicas y supervivencia nocturna en un proyecto piloto que busca preparar a profesionales civiles para futuras misiones espaciales tripuladas comerciales, es decir, futuras generaciones de astronautas comerciales en Europa.
La startup Parsec, con sede en Suecia pero formada por una decena de profesionales de todo el mundo —tres de ellos españoles-, es la responsable de este programa pionero en Europa que pretende cubrir un nicho de mercado dentro del denominado New Space, ofreciendo entrenamiento especializado a profesionales para que se puedan convertir en los astronautas que requieran las futuras misiones comerciales al espacio.
"Es una afirmación ambiciosa», ha reconocido en declaraciones a EFE el vicepresidente de Operaciones de Parsec, José Tórtola, pero recuerda que el New Space «ha llegado para quedarse» y si bien en Europa los proyectos se centran en el acceso de pequeños satélites y pequeñas cargas tripuladas, «el hombre va a necesitar estar en el espacio» y Europa no puede ceder el liderazgo a Estados Unidos.
"Vamos a seguir necesitando una presencia permanente en la Luna, vamos a seguir necesitando estaciones espaciales comerciales en órbita baja terrestre y todo eso va a demandar un capital humano que hoy por hoy no existe, con lo cual nosotros estamos empezando a formarlo ya», ha insistido.
El programa piloto arrancó meses atrás con la formación online, a la que accedieron seis profesionales del mundo civil aunque con vinculación aeroespacial, y esta semana se continúa en Burgos con la parte práctica, a la que han llegado cuatro de esos seis alumnos: cuatro ingenieros (dos hombres y dos mujeres).
La formación práctica, para la que cuentan con el apoyo del Centro de Empresas e Innovación de Burgos (CEEI), combina contenidos técnicos con actividades altamente especializadas: desde una sesión de acrobacias aéreas para experimentar una gravedad elevada hasta un entrenamiento de supervivencia nocturno, pasando por una simulación de aterrizaje forzoso y prácticas químicas y biológicas. Las condiciones meteorológicas no han permitido este miércoles realizar la sesión de acrobacias aérea en el aeródromo de Burgos.