Gitanas con mano izquierda

Drom es camino en la lengua de los gitanos y drom es el camino al que han llegado 24 jóvenes de 18 a 25 años -el 70% de origen rom, gitano- para aprender en León las técnicas básicas de fontanería, albañilería y mediación intercultural. La casa de oficios Drom, impulsada por la Fundación del Secretariado General Gitano y financiada por la Junta de Castilla y León a través del Ecyl, es la primera en la provincia que formará a mujeres gitanas para convertirse en mediadoras de su comunidad con el mundo payo. Rosario, Luli, Mari Cruz, Tere, Susi, Isa, Carmela y Diana son las pioneras del aprendizaje de una profesión que hasta ahora desempeñan hombres de prestigio dentro del pueblo gitano, como es el caso de Pablo Barrul Borja, más conocido como Tony, mediador autodidacta a partir de las primeras experiencias de integración social y educativa de los gitanos en León. Durante un año tendrán que estudiar conceptos como cultura y modelos de relación, descubrir y desentrañar su entorno administrativo y social para saber moverse entre los vericuetos de la burocracia, aprender a planificar y, sobre todo, practicar habilidades de comunicación. «Pero si lo que más nos gusta es hablar», aseguran entre risas las jóvenes, que cuentan entre 16 y 24 años de edad y unas ganas inmensas de abrirse camino en el mundo. Luli, que durante quince días compatibiliza la casa de oficios con un curso del programa de inserción Acceder, cuenta que en casa no la ven el pelo nada más que por la noche, «llego rendida y me voy a la cama». Las chicas llegan al centro de Pinilla desde Armunia y el barrio de Las Ventas y su ilusión es trabajar como mediadoras dentro del programa Acceder, que también gestiona la Fundación del Secretariado General Gitano. Drom empezó su andadura la semana pasada en las instalaciones que el programa de integración social y laboral tiene abiertas en el barrio de Pinilla y cuenta con una subvención de 243.000 euros del Ecyl. «Estos centros tienen un nivel de inserción profesional del 70 al 80%, por lo que a pesar de su elevado coste cumplen el objetivo», subraya el gerente del Ecyl en León, Francisco Javier Otazu. Además de la «formación de calidad», la casa de oficios garantiza una protección social y las prácticas en empresas durante la mitad del período de funcionamiento; además, en el caso concreto de Drom «se potencia la convivencia en el trabajo», añadió.