Un teléfono que mueve los labios

La técnica ha dado un paso al frente para integrar a la comunidad sorda. Parece increíble, pero gracias a un artilugio creado por investigadores del Real Instituto de Tecnología de Estocolmo, las personas con problemas de audición podrán mantener conversaciones telefónicas gracias a un programa informático que permitirá leer los labios del interlocutor a través de la pantalla del ordenador. El teléfono habitual impide la comunicación fluida de los sordos, puesto que una gran parte de ellos aprovecha los registros labiales que desarrollan sus interlocutores para detallar su comprensión. Ahora, una creación informática rompe esa barrera y permite a estas personas «ver» las palabras que emite quien le habla, transmitiendo los gestos faciales, sobre todo los movimientos de los labios. El sistema, denominado Synface, crea la imagen de un rostro virtual que reproduce fi elmente un alto registro de voces y movimientos faciales del interlocutor, permitiendo así observar y escuchar con nitidez el mensaje enviado. La idea de comenzar la investigación surgió en Estocolmo, con fondos de la Unión Europea, y contó con la colaboración del departamento de Fonética de la University College de Londres y el apoyo de dos centros, inglés y holandés, dedicados al desarrollo de aparatos para sordos. El Instituto de Tecnología de Estocolmo vio la posibilidad de aplicar una serie de trabajos destinados a desarrollar una tecnología informática dirigida a confi gurar un rostro que reprodujese el lenguaje humano. Una vez dividida la actividad fonética en sus unidades básicas articulatorias, los investigadores lograron reproducir los fonemas y situarlos en los movimientos de los 36 músculos faciales. El experimento ya ha recibido el visto bueno de la comunidad internacional y se dispone ahora a ser distribuido y comercializado dentro de un año. De momento, el programa informático estará disponible en los idiomas sueco, inglés y holandés, aunque los creadores aseguran que pronto estará listo en otras lenguas, como el español. El usuario deberá seguir los pasos habituales para realizar una llamada telefónica, e incluso el número podrá marcarse en la misma pantalla del programa. Mientras, la terminal permanecerá conectada al ordenador. Cuando el receptor de la llamada descuelgue, la imagen comenzará a reproducir las palabras que registre en su memoria, con independencia de la pronunciación o entonación, trasladándolas al rostro que inmediatamente surgirá en la pantalla. La gran ventaja que posee el sistema Synface es que, a diferencia de los aparatos de vídeo y audio que ya existen en internet, sólo el usuario con problemas de audición deberá poseer el programa, ya que su interlocutor no necesitará ningún dispositivo especial, ni siquiera saber si su mensaje será reproducido por una cara «desconocida». Los estudios han recogido la impresión de 40 disminuidos auditivos, que han reconocido la efectividad del sistema y su aportación para la facultad comunicativa. Aunque el número de personas con esta minusvalía es difícil de precisar, algunas estimaciones rondan los 80 millones en Europa. Las autoridades suecas advirtieron de un alto número de personas con problemas auditivos, por lo que el Instituto de Tecnología de Estocolmo abrió un proceso investigador que dio lugar al estudio de Synface. Sólo en Suecia, con una población absoluta de 9 millones de habitantes, unos 800.000 sufren algún tipo de problema auditivo, de los cuales, una tercera parte no se puede desenvolver sin la ayuda de algún aparato o asistencia personal.