Diario de León

El 27.029 deja 49 millones en la localidad de Alcoy y su comarca

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P. Pellín alicante
León

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El segundo premio de El Niño, el número 27.029, dejó ayer 49 millones de euros en la localidad alicantina de Alcoy. Tan sólo una serie viajó hasta Logroño, donde se repartió el millón de euros restante. Ante la puerta de la administración número 4 de Alcoy y bajo un tibio sol de invierno corrió hoy a raudales el cava valenciano. Sus propietarias no tardaron mucho en levantar el cierre metálico y sumarse a la fiesta con los parroquianos. «A mí no me ha tocado nada», explicaba emocionada la dueña de la administración, Purificación Santacreu, «pero tengo la sensación de que la adrenalina que hemos repartido entre la gente no tiene precio». La lotera, entusiasmada, saltaba y gritaba junto a los vecinos: «49 millones, ya no se lo que son, vosotros tenéis el dinero, ¡pues a gastar!». Juan y Jaume bebían de una botella de sidra sin poder contener las lágrimas. «Compramos tres décimos a ver que tal y mira lo que nos ha pasado. Nos han caído casi cincuenta millones de pesetas a repartir entre ocho». Lo mismo les ocurría a nueve amigas que celebraban en plena calle su suerte. Eran las propietarias de un décimo del 27.029, que «aunque no nos deja más de dos millones de pesetas a cada una nos ayudará a realizar arreglitos en casa». «Pues yo lo voy a invertir en la comunión del niño», apuntaba Toñi. Detrás de ellas estaba otro de los agraciados, Antoni, que había comprado un décimo antes de Navidad, «para evitar luego quedarme sin nada». «Como la salud ya la teníamos, pues ahora vamos a celebrarlo a lo grande», dijo. El décimo se había vendido casi todo por ventanilla, por lo que los millones quedaron muy repartidos, no sólo entre los vecinos de Alcoy, sino también por toda la comarca interior alicantina. Un pellizco del premio viajó a Madrid con Televisión Española. Cuatro miembros de la Redacción de Deportes compraron un décimo en la localidad alicantina, a donde fueron a cubrir la transmisión del partido de octavos de final de la Copa del Rey que hace unas semanas enfrentó al Alcoyano y al Atlético de Madrid. Los millones también llegaron a los clientes de un bar de la próxima localidad valenciana de Albaida. En este local, un vendedor ambulante repartió sesenta décimos adquiridos en la ciudad alicantina. «A mí no me ha tocado nada, pero tengo la sensación de que la adrenalina que hemos repartido entre la gente no tiene precio» PURIFICACIÓN SANTACREU Dueña de la administración

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