Diario de León

Para cortarlo mejor

Antonio Pérez Merillas, de Alija del Infantado, busca financiación para fabricar y comercializar un soporte jamonero que considera único y cuya patente ha tramitado

Antonio Pérez posa en su casa de Alija del Infantado con su prototipo

Antonio Pérez posa en su casa de Alija del Infantado con su prototipo

Publicado por
A. Domingo - alija del infantado
León

Creado:

Actualizado:

Antonio Pérez Merillas ha conseguido diseñar el que, en su opinión, es el jamonero ideal: un invento dotado de cabezas giratorias y de un carro que permite realizar el corte de toda la pieza sin necesidad de sacarla del aparato para girarla. Con el sistema de esta máquina -cuya patente se concedió a principios de mes, aseguró- es posible «aprovechar entre medio y tres cuartos de kilo más, porque puedes empezar a cortar desde el corvejón, desde la parte de atrás», señala este alixano, que trabaja en una refinería de Repsol en Cataluña. Es decir, que el «soporte para el corte de jamones con mecanismo de giro manual», como se denomina en la documentación tramitada ante la Oficina de Patentes y Marcas, es para cortarlo mejor. Este inventor por afición, admirador de los cortadores de jamón, comienza a trabajar en el jamonero ideal cuando, en un programa de televisión, ve «unos seis o siete jamoneros que se presentaban como recién inventados. No me gustó ninguno, porque todos apoyaban la parte más ancha». Y parece que el disgusto le produjo la picazón que le puso manos a la obra. Corrían los inicios del año 2005 y, hasta llegar al modelo definitivo, en acero inoxidable y con una base de madera, ha fabricado «tres o cuatro modelos diferentes», que no llegaron a convencerle. En el encargo de piezas y en la tramitación de la patente ha invertido, según dice, entre 7.000 y 8.000 euros, además de una considerable cantidad de tiempo. La pieza, en el aire Las cabezas giratorias no sólo permiten no tener que sacar la pieza del jamonero para girarla. Además, posibilitan que éste quede en el aire. La guía del carro, que se mueve gracias a un tornillo sin-fin, permite adaptar la distancia entre ambas cabezas de forma precisa, ya se trate de una pieza de gran tamaño o de una paletilla. Ahora, lo que necesita Antonio Pérez es «financiación para fabricar y comercializar» el jamonero, un aparato cuyo mercado se encuentra en los secadores de jamones, las cadenas de supermercados con jamón al corte y los mayoristas de hostelería, ya que, «quizá sean los restaurantes y hoteles los mejores clientes». Pérez Merillas no descarta la venta a través de Internet, ya sean piezas sueltas o al por mayor. El mercado de los particulares no será demasiado significativo, estima. «Seguridad, comodidad y ahorro de tiempo» son los fundamentos de un aparato «tan fácil de manejar que incluso es útil para personas con pequeñas minusvalías».

tracking