Diario de León

El pacto de Shakira con Hacienda: 3 años de cárcel y una multa millonaria

La cantante Shakira a su salida de la Audiencia de Barcelona tras aceptar este lunes el pago de una multa millonaria a cambio de una rebaja de condena que evitará su entrada en prisión, tras admitir que defraudó 14,5 millones a Hacienda entre los años 2012 y 2014. ENRIC FONTCUBERTA

La cantante Shakira a su salida de la Audiencia de Barcelona tras aceptar este lunes el pago de una multa millonaria a cambio de una rebaja de condena que evitará su entrada en prisión, tras admitir que defraudó 14,5 millones a Hacienda entre los años 2012 y 2014. ENRIC FONTCUBERTA

Publicado por
Cristian Reino
León

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Se esperaba que fuera el juicio más mediático de los últimos años. Tras su separación de Piqué, la venganza cobrada en forma de canciones y los grammys ganados, Shakira está más en el candelero que nunca.

Se enfrentaba a una condena de ocho años de cárcel por seis delitos fiscales contra la Hacienda Pública cometidos entre 2012 y 2014. Al final, hubo pacto extrajudicial entre las partes, y el juicio, que empezó este lunes en la Audiencia de Barcelona, apenas duró media hora. La cantante colombiana reconoció los hechos y con una condena puso fin a una causa penal que se ha prolongado durante cinco años.

De acuerdo con el pacto alcanzado entre sus abogados, la Fiscalía, la Abogacía del Estado y la Generalitat, la cantante colombiana aceptó una pena de tres años de prisión, que no cumplirá, y el pago de una multa para reparar el daño causado a las arcas españolas de 7,3 millones.

A cambio de 432.000 euros, no entrará en prisión. Con el pacto, Shakira ha reducido la pena, de ocho a tres años, y también la multa, de 24 millones a siete. Aunque en su día ya pagó 17 millones como devolución con intereses de los 14 millones defraudados. El tribunal, en la sentencia, le aplica el atenuante de reparación del daño. La cantante justificó el acuerdo alcanzado con las partes porque "sus hijos se lo habían pedido". Su equipo legal ha evitado "el desgaste, el tiempo y el impacto de la exposición mediática" que el juicio podía tener en la artista colombiana.

"Shakira siente la necesidad de priorizar su carrera y su estabilidad y la de sus hijos", señalaron sus abogados. "Estaba lista para enfrentarme a un juicio y defender mi inocencia. Mis abogados estaban convencidos de que teníamos un juicio ganador", afirmó la cantante en un comunicado.

"Tenía dos opciones: seguir peleando hasta el final, hipotecando mi tranquilidad y la de mis hijos, dejar de hacer canciones, álbumes y giras, sin poder disfrutar de mi carrera y las cosas que me gustan, o pactar, cerrar y dejar atrás este capítulo de mi vida mirando hacia adelante", afirmó la autora del 'Waka Waka'. "He llegado a la conclusión de que no es triunfo ganar si el precio es que te roben tantos años de tu vida", remató.

La cantante asegura que ya ha pagado 60 millones, pero por otra causa con Hacienda, de 2011, que no está abierta por la vía penal. Tiene aún un tercer caso pendiente, por dos presuntos delitos contra la Hacienda Pública a causa del IRPF y el impuesto sobre el patrimonio del ejercicio 2018.

El hecho de tener antecedentes penales es un serio hándicap de cara a esta causa penal, que también comporta penas de prisión.

Breve declaración

Shakira se sentó este lunes brevemente en el banquillo de los acusados. Se limitó a reconocer los hechos y las penas con un lacónico "sí". "¿Reconoce los hechos y se conforma con las penas?", le preguntó el juez, tras dar a conocer el acuerdo de conformidad. A continuación leyó la condena. La Agencia Tributaria le imputaba haber dejado de pagar 14,5 millones en IRPF y sociedades entre 2012 y 2014 al simular presuntamente que no residía en España.

Ella alegaba que no vivía en España y que aunque ya compartía su vida con Piqué en Barcelona viajaba a la capital catalana de forma esporádica. Su argumento principal fue que se instaló en la Ciudad Condal a finales de 2014, cuando se escolarizó su hijo mayor. Hacienda y la Fiscalía sostenían que entre 2012 y 2014 Shakira ya vivía en España, en Barcelona, y por tanto tenía que abonar sus impuestos ante la Agencia Tributaria española. Según la Fiscalía, creó un entramado societario en paraísos fiscales para ocultar sus ingresos al fisco.

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