Cadenas: «La falta de ingresos me obliga a fichar jugadores jóvenes con proyección que cobren poco»

Ya advirtió el pasado verano que la actual temporada —tal y como se concibió— resultaría asfixiante por la «tremenda carga» de partidos. En realidad todos los clubes lo sabían pero nadie quiso escuchar. Aún así su Ademar 2.0 tiene ya en el bolsillo billete europeo para la 2021-22, lo que sin duda tapa el resto de carencias de «una plantilla corta» y «descompensada». Todavía restan seis partidos más para que caiga el telón pero Manolo Cadenas ya anda dibujando su próximo boceto. Un equipo —el que está por venir— joven, fuerte y formal , que diría Loquillo.

—Por ahora el club ha anunciado dos fichajes para la próxima temporada. ¿Cuántos más van a llegar?

—No sé cuántos jugadores van a sumarse al equipo en total para la próxima temporada, tampoco es un tema que me preocupe ahora mismo cuando todavía no hemos finalizado la actual. De todas maneras no es un plan cerrado porque depende de varios factores. El presupuesto es el que es y si fichas cinco primeras líneas, por ponerte un ejemplo, pues igual no hay para un sexto. Pero, por concretar un poco, hay que buscar un lateral zurdo y si se va Natán Suárez habría que traer otro central.

—¿Lo de Natán no lo das como hecho aún? Al parecer ya tiene apalabrados tres años con el Sporting de Lisboa...

—Es probable que salga pero no está hecho todo al cien por cien o imagínate que mañana se lesione, ¿dónde se va a quedar? Pues aquí. Esto cambia mucho en cualquier momento.

—¿Pero el perfil va a ser el de jóvenes con proyección?

—Está claro que los sueldos de los jugadores han bajado pero mi idea es hacer una plantilla más amplia que la de este año porque la actual quedó descompensada cuando se fue Mario López y no entró nadie por él, lo que nos obligó a subir a Antonio (Martínez) y en el lado derecho nos faltó otro jugador. Hay que pensar que luego se dan lesiones de larga duración como la de Semedo y no tienes a nadie para sustituirle.

—Hace unos días, en un homenaje a Viran Morros, comentabas —comparando los sueldos de ahora con los de antaño— que te da a veces hasta reparo llamar a jugadores para ofrecerles poco más de mil euros...

—Ahora mismo es lo que hay así que tienes que ir a por jóvenes solteros, que vengan por poco dinero y quieran alcanzar una mayor proyección en el balonmano. Rubén Marchán es un ejemplo reciente.

—El problema es que ‘Marchanes’ hay pocos. ¿Te han defraudo los fichajes que has traído este año?

—Defraudado no pero sí que esperaba mucho más de algunos de ellos. Digamos que no se han adaptado a la Liga Asobal.

—¿No haber ejecutado el año de Piechowski y Kisselev les descarta ya de cara a la 2021-22 o volverás a planteártelo a final de temporada?

—Ahora mismo tengo otras alternativas porque quiero un rendimiento más inmediato.

—¿Y en el caso de Guilherme y Marko crees que sí darán ese rendimiento?

—Guilherme es un pivote que no ha salido antes de Brasil porque no había terminado sus estudios y ahora hemos aprovechado el momento para darle su primer contrato en Europa y que él tenga una oportunidad de crecer en el Ademar. Puede defender en el centro y en el lateral y además juega en ataque. Quiero, siempre que se pueda, fichar jugadores que rindan en las dos áreas porque si solo eres efectivo en una de las dos facetas al final necesitas otro que lo sustituya. Lo mismo sucede con Milosavljevic. Los dos disputaron el Mundial de 2019 (en Galicia) y están en un buen momento. El serbio puede jugar tanto de lateral como de central. Esa polivalencia nos vendrá muy bien.

—Feutchmann y Carrillo, los más veteranos de la actual plantilla, no continuarán en el equipo. ¿No te preocupa que se pierda esa figura entre tanto jugador joven?

—No me preocupa. Es cierto que en alguna ocasión la experiencia te da más calidad pero también tenemos jóvenes que pueden desempeñar ese papel. Aparte que todavía puede llegar algún fichaje más veterano.

—Juan Castro cumple ese perfil y está en tu agenda.

—Sería un gran activo para el Ademar pero no sé si al final se podrá llevar a cabo por el tema económico. Todavía no hay una decisión firme pero está claro que Juan siempre ha sido un jugador interesante para el club. Desde luego cuenta con esa experiencia de la que hablábamos y conoce de sobra lo que es este equipo.

—Quizá este año ha terminado de explotar...

—Ya lleva varias temporadas a gran nivel y el Ademar, antes de regresar yo al banquillo, ya lo quiso traer.

—Otra posición que te verás obligado a reforzar es la portería...

—Tenemos una de las mejores porterías de la Liga pero a Dino (Slavic) es muy complicado poderle retener. Lo suyo sería mantenerles pero no se puede y el que en este caso tiene contrato es Khalifa. Dino irá a un equipo de más nivel y crecerá en todos los aspectos. Buscaremos un portero joven, barato y bueno. Esa va a ser la dinámica.

—¿Balázquez finalmente se queda en Japón?

—Eso parece y también, como puede ocurrir con Natán, afecta a la hora de vernos obligados a realizar más cambios de los que en un principio creíamos.

—Antes hablamos del año adicional de Kisselev y Piechowski, en el caso de Gostovic sí que le queda uno más de contrato aunque no sé si cuentas con él.

—Veremos a ver cómo va porque le está costando también jugar a nivel Asobal en el Ademar. Es joven y le falta regularidad.

—Donlin sí que ha dado ese salto de calidad en su segundo año. Ahora mismo su continuidad depende del ejército de Estados Unidos. ¿A ti te gustaría mantenerle en el equipo una temporada más?

—Por supuesto. Es un jugador de calidad y encima tiene una situación económica ventajosa para el club. Tener a Drew en lo deportivo, por su implicación en el equipo, es importante y un ejemplo para el resto en todos los aspectos.

—El año pasado, en otra entrevista, me aseguraste que Donlin podía dar un salto de calidad increíble si seguía en el Ademar. En aquel momento era un jugador residual pero ahora es casi insustituible en defensa. ¿Lo ves capaz de desatarse también en el aspecto goleador?

—Bueno, quizá no tanto, le faltan cosas todavía y ahora mismo no es una buena época para él. Lo está pasando mal con toda esta incertidumbre sobre su futuro. Está nervioso porque él tiene muchas ganas de continuar.

—¿El club en este caso no puede hacer nada para presionar?

—No, no podemos.

—¿Tienes la sensación de que la Copa del Rey, con el premio extra de la plaza europea, ha sido la tabla de salvación del Ademar en un año que ya advertiste sería muy complicado?

—Hombre, el salvavidas nunca sabes dónde va a estar. En la Copa del Rey jugar una final después de tanto tiempo y conseguir la clasificación europea desde luego que a efectos prácticos resultó fenomenal. Pero también es cierto que en la Liga Europea jugamos a un gran nivel. Batimos al Wisla, que ahora está en la final four.

—El ‘debe’ está en la Liga Asobal...

—Nos hemos visto muy perjudicados por la pandemia y la forma en que se produjeron los partidos. En una situación normal estaríamos luchando por estar entre los tres primeros clasificados, no tengo ninguna duda.

—¿Qué nota le pones a la temporada?

—Estoy muy satisfecho con el rendimiento del equipo. En los entrenamientos veo un grupo que trabaja unido, con ganas y eso ha hecho posible muchas cosas, una de ellas lo vivido en la Copa del Rey. Cuando hablo de momentos importantes en la trayectoria de un equipo recurro al papel hecho este año en la Copa. Y no hablo tanto por haberle ganado a Bidasoa y Huesca sino por las circunstancias en la que llegaba el equipo a esa fase final. Dos victorias épicas porque había mucho cansancio y viajes detrás. Hicimos algo grande y con solvencia. Si te fijas, la anterior temporada donde dimos ese plus fue en la Liga —con esa segunda posición— mientras que en Europa nos fuimos sin puntuar cuando se cortó la competición y la Copa del Rey no se puede evaluar porque el segundo partido nos tocó el Barcelona.