Todo un sábado de pasión en el Palacio
Cientos de banderas de León tiñeron las gradas de color púrpura alentando lo que iba para gesta.
georgino fernández | león
La gran pancarta que se veía en uno de los fondos del Palacio ya era premonitoria. «¡Ademar a por ellos!». Y fueron. Bien es cierto que hubo que esperar a la segunda mitad para ver la mejor versión del equipo de Rafa Guijosa pero lo cierto es que hacía tiempo que no se veía por aquí un choque tan intenso y que acitvase de esa manera a la grada. Llegaban los parientes ricos de la liga y como siempre el Palacio se puso feliz en su papel de aldea de Astérix y Obelix, los galos irreductibles contra el poder de las blaugranas legiones romanas. Y esa poción mágica que se cocina en el viejo coliseo leonés cada vez que hay un partido como el de ayer estuvo a punto de dar resultado. Miles de gargantas gritaron el famoso «¡Sí se puede!» cuando el Ademar empezó a soplarle en la nuca al Barcelona y a amenazar seriamente el récord de 115 victorias seguidas en la liga con el que llegaron a León. No es por nada pero un poco de cara de canguelo se les puso a los de Xavi Pascual en los últimos minutos. Volvieron a librarse por los pelos pero como el cántaro siga yendo a la fuente...