El origen democrático de algunas dictaduras

Entre los numerosos sistemas de gobierno que ha habido desde la Prehistoria, hasta este siglo, hay que destacar que, por ejemplo, los faraones egipcios, se hacían llamar hijos de Amón-Ra y los reyes de Israel y Judá, ungidos de Yahveh; algunas monarquías actuales basan su legitimidad, en que sus monarcas son descendientes de profetas del dios de Israel.

Actualmente, los sistemas de gobierno, podemos reducirlos a tres: teocracia, dictadura y democracia; y según Winston Churchill la democracia es el menos malo de los tres, lo que significa que los otros son peores.

Curiosamente, si vemos como se definen los distintos estados, (de todo el mundo), sólo encontramos monarquías (teocracias, constitucionales y semi-constitucionales) y, por otra parte, repúblicas (constitucionales, de partido único, y socialistas). Ni un solo país estaría gobernado por un dictador; curiosamente todos los gobernantes se consideran demócratas, un caso curioso es el se daba en la Alemania de Este, ¡la comunista! conocida como «Republica Democrática» y la Occidental, la verdaderamente democrática, como «República Federal».

El comunismo, (socialismo real), se impuso en Rusia después de unas elecciones, que ganaron los Mencheviques, pero los Bolcheviques, (comunistas), no aceptaron el resultado y mediante un verdadero golpe de estado, Lenin impuso la dictadura.

En España las elecciones municipales de 1931, las ganaron los monárquicos, pero sin esperar al resultado, Alfonso XIII, abandonó España, (supongo que pensó que podría acabar como el Zar de Rusia), y se instaló la república, en cuyo gobierno se impuso el Frente Popular, teledirigido desde Rusia, por Stalin.

En la foto, publicada por ABC , durante la república, se ve con claridad a los dos ejemplares, que posan ante un cartel republicano; falta Stalin, que por supuesto hubiera estado encantado en acompañarlos, pues eran los tres, socialistas.

El origen socialista del fascismo que marcó profundamente a Hitler y Musolini. En 1933, con la llegada al poder del Partido Nacional Socialista Obrero alemán, más conocido como Partido Nazi, del que era presidente Adolf Hitler, en Alemania se instaló una dictadura.

En Rusia, ya se había instalado, en 1922, la Dictadura del Proletariado, oficialmente nominada: Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas de las que era presidente Stalin.

El fascismo nació en Italia, impulsado por Benito Mussolini, miembro destacado del Partido Socialista Italiano.

En España, los partidos fascistas, (durante la república), fueron Esquerra Republicana de Cataluña y Falange; actualmente los líderes de Esquerra siguen reivindicando la memoria de los fascistas.

Un ejemplo de esta actitud lo brindaron las Juventudes de Esquerra Republicana de Cataluña, que recientemente, en las redes sociales, reivindicaron sin paliativos a dos figuras históricas tan cuestionables como los hermanos Badia.

Miquel Badia (10 de marzo de 1906-28 de abril de 1936) impulsó junto a su hermano Josep las Juventudes de ERC-Estat Català (JEREC), una organización fascista que, bajo el nombre de escamots , llevaban a cabo acciones de violencia política, sobre todo contra anarcosindicalistas de la FAI.

En represalia por estos actos, y por su papel al frente de la  Comisaría General del Orden Público de la Generalitat, tres anarcosindicalistas se vengaron de ellos ajusticiándoles en la calle Muntaner el 28 de abril de 1936.

No hace falta ser un experto, en análisis gramatical, para saber que «nazismo», «fascismo» y «comunismo» fueron tres maneras dictatoriales de ejercer el poder, al que llegaron estas tres dictaduras ¡socialistas!, desde la democracia.

Es evidente que «nazismo», «fascismo» y «comunismo», tienen las mismas raíces y forman parte de lo que se considera como «partidos de izquierda», pero no partidos de derechas.

Tanto Stalin como Hitler, fueron dos dictadores de ideología criminal, los dos crearon campos de concentración, para el exterminio de los que consideraban sus adversarios, a los que calificaban de enemigos, o simplemente por considerarlos de razas inferiores; ambos cometieron crímenes contra la humanidad, que no deberían prescribir.

Benito Mussolini, parece ser que aunque también cometió crímenes, no tuvo campos de concentración donde masacrar a tantas personas y no cometió tantos crímenes, como los anteriores, lo cual no es ningún atenuante.

Según Kapuscinski no cabe la menor duda de que Stalin, fue mucho peor que el dictador nazi Adolf Hitler. Según este autor «la mayor matanza de la historia ha sido la de Stalin», aunque Hitler no le vaya muy a la zaga.

En pleno siglo XXI, cuando ya parecía que no había dictadores, ha surgido del letargo, el dictador comunista Putin que ha invadido Ucrania y en España tenemos partidos comunistas, en el gobierno y fuera del gobierno, que le apoyan; Sr. Sánchez; tenemos un refrán que dice: «dime con quien andas y te diré quien eres»; traducido al lenguaje común, Sánchez es un comunista, por lo tanto un dictador, disfrazado de socialdemócrata.

¿Por qué los paridos españoles, de izquierda, demonizan a los socialistas: «racista» y «nazista», el alemán, fascista el italiano y bendicen al socialista «comunista» ruso?

En España tenemos dos partidos conservadores, a los que desde la izquierda se suele acusar de «fascistas»; sin embargo, en las pocas manifestaciones que han organizado, no ha habido actos violentos, normales en las manifestaciones de izquierdas; tampoco son «racistas»; en España, al menos, tenemos un partido «racista», el PNV. Según Sabino Arana los vascos son superiores al resto de españoles.

¿Por qué desde el PP y sobre todo desde Vox, cuando los líderes de izquierda, les califican de «nazistas» y «fascistas», no les devuelven el calificativo y con documentos, les demuestran que son ellos los nazistas y fascistas?