Diario de León
Publicado por
ernesto escapa
León

Creado:

Actualizado:

M ientras la piñata eólica entra en investigación parlamentaria con la tutela de Silvia Clemente, otras energías saludables van tomando impulso, después de lustros de abandono y olvido. Por ejemplo, la biomasa, anunciada hace ocho años como inminente para el polígono de Carrocera, que es mi pueblo. Incluso se decía entonces (mayo de 2007) que la ejecución de la fábrica ya estaba muy adelantada. Lo hizo Isabel Carrasco en una reunión electoral con candidatos celebrada en Canales, a la vez que calificaba la planta como «proyecto muy importante, tanto por la limpieza y mejora de los montes, como por su generación directa de empleo». Diecisiete meses más tarde, fue el presidente Herrera quien concretó la dimensión que iba a tener el proyecto radicado en mi pueblo, pionero en la provincia. Ya no era un anuncio con humo de pajas ni un desmán tabernario.

La fábrica de pellets para calefacciones de nueva generación alimentadas con biocombustibles sólidos la promovía el Ente de la energía de Castilla y León (Eren) y su ejecución tenía un coste superior a los dos millones de euros (alrededor de 400 millones de pesetas), con cargo el presupuesto de 2008. El complejo industrial iba a disponer de todos los tramos del proceso: la recepción de la biomasa, el triturado del material, las planchas de secado, la molienda, el paletizado, el enfriado y el almacenaje. La fábrica de Carrocera dispondría de un sistema mecanizado capaz de obtener cuatro toneladas de este tipo de combustible a la hora, con una previsión anual de diez mil toneladas de pellets. Y señalaba que los restos de cenizas depositados en las calderas tras la combustión en este proceso no llegan al 1%. Así que todos felices como perdices.

Treinta y dos meses más tarde, en abril de 2011, la Junta de Castilla y León concedía una subvención de 4.700.000 euros al ayuntamiento de Carrocera para la construcción de una nueva fase del polígono industrial de los Avezales, situado junto al peaje de La Magdalena. En el detalle de tareas subvencionadas se mencionaba la adquisición de terrenos, la construcción de infraestructuras, la ejecución de saneamiento, depuración y señalización. Por último, se colgaba el desglose del compromiso por anualidades, todas ya vencidas y la mayoría sin ejecutar. Un ligero clareo por la zona despeja el espejismo. Todo sigue como estaba hace ocho años, con el inconveniente añadido de una rotonda construida en medio de la carretera autonómica 623. Ni más ni menos. Pero el asunto se ha revuelto y avivado con dos hechos recientes. Primero, la reunión de dirigentes socialistas convocada por la nueva alcaldesa de Carrocera la pasada semana, de la que brotó una declaración en defensa del medio rural, a la vez que el compromiso expreso de recuperar las inversiones no ejecutadas en el polígono industrial durante estos años. Y en segundo lugar, la celebración en Valladolid de una nueva edición de la feria Expo Biomasa, con la firma de un convenio estratégico de la Junta con los daneses, líderes tecnológicos de esta energía, que aprovecha el desbroce y limpieza de los bosques y los desechos agrícolas. Nuestros bosques tienen un potencial de generación de biomasa equivalente a 15 millones de toneladas de petróleo, y sobre todo, la expectativa de crear cuatro mil nuevos empleos rurales en cinco años. Y en ese terreno sí que nuestra aportación supone el veinte por ciento del país. Además, con la vitola de sostenibilidad reconocida.

tracking