Silvia, la última víctima, sufrió una agresión «extremadamente violenta»

M.L.M. /P.C. / G.I. | BURGOS

Silvia Plaza Martín es la undécima víctima de violencia machista en lo que va de año en España. La joven burgalesa de 34 años falleció a última hora del domingo a consecuencia de la paliza que le habría propinado su expareja, un hombre de 36 años y nacionalidad colombiana, que fue detenido poco después de la agresión. Los hechos ocurrieron sobre la 1.30 horas del domingo, en la calle San Antón, en el barrrio burgalés de Gamonal. Según explicó ayer el subdelegado del Gobierno, Roberto Saiz, la mujer fue víctima de un «ataque extremadamente violento».

La agresión se produjo en plena calle, cerca de un establecimiento de hostelería donde el agresor habría encontrado a la mujer, a la que golpeó y pateó hasta la llegada de la policía, momento que aprovechó para huir. Fue finalmente detenido.

Los vecinos avisaron al 112 al escuchar los gritos de la víctima. Cuando los agentes y los sanitarios llegaron al lugar encontraron a Silvia Plaza tirada en el suelo, entre varios vehículos, con múltiples heridas, varias en la cabeza. Trasladada al Hospital Universitario de Burgos, falleció tras varias intervenciones quirúrgicas.

Roberto Saiz confirmó que la mujer y su presunto agresor habían sido pareja. La joven lo había denunciado por malos tratos. Por este motivo, sobre el hombre pesaba una orden judicial de alejamiento, que quebrantó el domingo. La Policía Nacional investiga las circunstancias del suceso a fin de determinar cómo se inició la agresión y si el ahora detenido fue a buscar a la víctima o se la encontró por casualidad en el barrio.

Las reacciones políticas fueron inmediatas. La Junta condenó el crimen machista y reclamó que esta forma de violencia «no sea silenciada». En un comunicado, el Gobierno autonómico ha instado a que cualquier mujer que detecte o que sufra cualquier tipo de malos tratos o violencia denuncie. «Tiene a su disposición una red de recursos para atenderla y asesorarla en cualquier cuestión que pueda necesitar». La Junta llamó también al compromiso de la sociedad «contra la lacra de la violencia machista» y «el rechazo frontal a que el hecho de ser mujer suponga un factor de riesgo para su propia vida».

El Ayuntamiento de Burgos convocó de urgencia una concentración de cinco minutos en la Plaza del Rey San Fernando, junto a la Catedra, en señal de condena y en solidaridad y apoyo a la familia de la víctima. También se pronunció la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat, quien condenó este último asesinato machista y mostró su «apoyo más sincero» a la familia de la víctima. «El Gobierno defiende a las mujeres y lucha cada día contra la violencia de género», recordó la ministra.

El PSOE de Burgos y el de Castilla y León señaló que para ganar la batalla a la violencia de género se requiere del «máximo compromiso» por parte de las administraciones públicas y una «absoluta unidad» para que así sea erradicada «de una vez por todas» e instaron al Gobierno de Rajoy a aportar dinero al Pacto contra la Violencia de Género. Como ellos, mostraro su repulsa Podemos, Ciudadanos, el resto de los partidos políticos e instituciones de todo el país.