Diario de León
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Crítica de televisión yolanda veiga

Las modistas de las galerías Velvet se han marchado a París, a ver si se les pega algo. Prometen venir con nuevos tejidos y diseños con los que contentar a la clientela. A las señoras ricas, porque a la otra clientela, a la de casa, la tienen ganada desde el principio. Estamos asistiendo, un poco incrédulos a decir verdad, al pelotazo de Velvet. No es una serie mala, pero tampoco es la mejor que hemos visto. Pero funciona, funciona muy bien, y ante eso no hay muchos ‘peros’ que poner. La prueba de fuego fue el estreno de Supervivientes , que se quedó pequeño pese a que han llevado a Bibiana Fernández, al chino vasco contestón o a la hermana de Ronaldo. Por cierto, que Jorge Javier dijo que el futbolista estaba viendo emocionado la tele, pero los periodistas deportivos aseguran que a Cristiano le hace entre poca gracia y nada. El caso es que Velvet , con un capítulo discreto sin grandes giros en el guion, se impuso cómodamente a los robinsones y seguirá haciéndolo.

Han acertado en Antena 3 programando Velvet a continuación de El tiempo entre costuras , aunque no es el mismo producto, no hay más que ver los vestidos que cosía Sira Quiroga y los que remienda Ana. Tampoco es un historión porque lo del chico rico enamorado de chica modesta, los dos guapísimos, lo hemos visto otras veces antes; también lo de la hermanastra y la madrasta malvadas. Lo más original es que el personaje de Cristina (Manuela Velasco) no es una bruja, sino una pija encantadora. Tan encantadora como Ana (Paula Echevarría), lo que está provocando entre el público adhesiones por ambas partes. Eso no puede ser casual, tiene pinta de estar más que pensado, muy bien pensado. Que Cristina sea como es multiplica las posibilidades de los guionistas. Porque no sería descabellado que Alberto (Miguel Ángel Silvestre, un protagonista curiosamente con muy poco texto) se enamorara poco a poco de ella y dejara a un lado a Ana. Sería un giro interesante para las dos actrices. Ese poquito de picante que le falta a esta salsa.

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