Sentando cátedra

En María Carrera se conjugan la ciencia y el arte. Todo el entramado de un oficio milenario, del ilustre oficio de pintor, está presente en los elaborados cuadros de esta pintora. Y en ella también está presente ese genio, esa extraña intuición que convierte a una persona en artista. María Carrera es madrileña, cursó estudios en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, consiguiendo el expediente más brillante de su promoción y Premios de Estado. En el año 1962, por concurso de méritos, gana una beca para ampliar estudios en la Escuela de Arte de Florencia. Posteriormente fue invitada por el gobierno italiano y becada por la Fundación Juan March. Es doctora en Arte, especialidad en Pintura, Profesora Titular de Dibujo y Catedrática de Dibujo del Natural en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense. En su dilatada carrera ha realizado centenares de exposiciones prácticamente en todas las capitales españolas. Su obra ha visitado varios países extranjeros, entre ellos Suecia, Alemania, Estados Unidos y Austria. Con este resumen de su biografía bastaría para que los lectores se hicieran a la idea de que en la sala de arte Bernesga, se les ofrece la oportunidad de admirar unas obras de enorme categoría y, ciertamente, no se equivocan. María Carreras domina a la perfección la técnica del bodegón, presentándonos algunos trabajos de singular maestría en los que, a pesar del academicismo que los distingue, encontramos interesantes citas de pintura moderna. La pintora se muestra impecable en el dibujo, exquisita en el color, perfecta en la composición... pero, además, demuestra una fresca soltura, un enérgico trazo, una caligrafía llena de personalidad, que hacen que sus cuadros transmitan al espectador, en una sola mirada, toda la belleza que atesoran. Pero hay más. Hay paisajes en los que la autora actualiza aún más su pintura inventando increíbles versiones de las Meninas velazqueñas, en las que María Carrera juega a divertirse y a divertirnos, a la vez que hace un sobresaliente ejercicio pictórico. Y hay personajes casi mitológicos y escenas del carnaval veneciano... En el arte cada uno es muy libre de elegir los derroteros que prefiera, de sentirse identificado con uno y otro estilo, de apuntarse a esta o aquella vanguardia, pero pensamos que cualquiera puede sentir la emoción del arte contemplando las obras de María Carrera, una gran pintora.