«Espero que se haga justicia»

El tutor del árbitro de 16 años agredido al término de un encuentro de la categoría prebenjamín celebrado el pasado sábado entre el Bosco B y el San Andrés B se encuentra muy molesto con el sesgo que está tomando la situación denunciada.

El joven colegiado, que ayer se reincorporó a sus estudios con total normalidad, continúa estando pendiente de la evolución de la laceración en la córnea del ojo derecho, pendiente de una nueva revisión que previsiblemente se le realizará mañana al arrastrar todavía una gran inflamación en la grasa que rodea la órbita y que está fuera de sitio, motivo por el que continúa tomando antibióticos y antiinflamatorios.

El tutor manifestaba ayer a este periódico que, «no entiendo cómo es posible que el agresor no esté identificado todavía, cuando hay testigos de los hechos, un video y fotos», con posterioridad a esta afirmación la Subdelegación del Gobierno indicaba que ya estaba identificado el agresor, pendiente de su localización para que preste declaración como imputado por una falta con lesiones.

La situación de acogida por un programa de estudios del árbitro agredido y su condición de menor de edad complica la situación ya que al entrar de oficio la Fiscalía de Menores de León la denuncia no puede ser retirada.

El propio tutor aseguraba con rotundidad que, «espero que se haga justicia con este caso, porque la obligación de la Policía Nacional es proteger al agredido y, además de la lesión en el ojo, también recibió golpes en el pecho, vientre y abdomen, y los autores sabían lo que hacían y como pegaban, porque uno le sujetó por la espalda y el otro le agredía. Son hechos que presencié, pero yo estaba más pendiente de llamar al 112 y de su llegada que de otra cosa».

«Está animado a seguir»

Pese a la agresión sufrida, el joven colegiado está muy animado a seguir en el difícil mundo arbitral, «su intención es la de continuar dirigiendo partidos. Asegura que es un hecho aislado y quiere seguir».

El colegiado dio muestras de su integridad y concienciación porque según manifiesta su tutor el joven le dijo que, «no tienen porque echar al niño del equipo, porque él no tiene la culpa de lo que haga su padre, indicando además que tampoco deben echar al equipo de la competición porque tampoco es culpable».

El árbitro lleva desde el 2008 en régimen de acogida, habiendo estado hasta el 2012 en Ponferrada, jugando en el Santa Marta, pero al desplazarse su tutor a León el niño vino a la capital, jugando la temporada 2012/13 en la Peña. Esta temporada iba a jugar en el Onzonilla, pero por problemas de tramitación de licencia decidió iniciarse en el mundo arbitral.