La Deportiva ya puntúa a domicilio
La Deportiva sumó su primer punto como visitante en esta Liga y propició que el Fuenlabrada se dejase los primeros puntos tras ganar en las jornadas previas. 1-1 en un choque en el que el equipo local fue mejor, pero en el que la falta de puntería y el buen papel defensivo del rival le impidieron mantener el pleno de victorias y le hacen caer de los puestos de ascenso.
Mere repitió el once que presentó ante el Real Oviedo y Bolo, casi el que dispuso contra el Tenerife. Luis Valcarce, que el pasado domingo entró en los minutos iniciales por la lesión de Ríos Reina, jugó en el lateral izquierdo.
Aunque el equipo local tuvo el balón en el inicio y tapó bien la salida del juego berciano, tras el primer cuarto de hora se empezó a ver al equipo que la Deportiva nos tiene acostumbrados. No llegó demasiado el cuadro de Bolo en el primer tiempo, pero fue tremendamente efectivo. En la mejor llegada, un slálom de Luis Valcarce que acabó con un pase de la muerte, Glauder se cruzó in extremis para quitarle a Isi la posibilidad de empujar el cuero a gol.
El equipo local lo intentó sobre todo en acciones a balón parado y en centros desde los costados. Pero quizá en el único despiste defensivo visitante el Fuenlabrada pudo adelantarse en el marcador. Jeisson dejó un balón para la llegada de Clavería, que sólo con el portero por delante golpeó mal, salvando Manu García. Fue la única acción clara del cuadro del sur de Madrid en el primer acto, si bien gozó de más remates, pero resueltos todos con remates desviados.
La Deportiva se fue soltando y el partido se igualó, aunque como en Cádiz le costó asomarse al área contraria. Sin embargo, en el minuto 35 un pase de Son para Larrea continuó con un golpeo del madrileño que sorprendió a Biel Ribas junto a la base del palo para poner el 0-1. Y quizá sorprendió a todo el mundo, porque el mediocentro resbaló y cayó al suelo en el golpeo.
El segundo tiempo fue del equipo azul. La Deportiva tuvo que defenderse. Apenas tuvo ocasión de salir con el balón jugado y los desplazamientos en largo no encontraron destinatario.
En el minuto 56 un centro al área berciana golpeó en la mano de Óscar Sielva y el colegiado decretó penalti. Pero Manu García, como hiciera en marzo ante el Castilla, adivinó las intenciones de Hugo Fraile y despejó el tiro.
El cuadro local siguió atacando. Oriol Riera saltó al campo por un gris Jeisson. Mientras, Bolo metió otro mediocentro para intentar tener más el balón y pasó a jugar con un 4-5-1. Pero no le salieron las cosas en ese sentido.
Riera marcó ante Manu en un balón a la espalda de la defensa, ya cuando Noguera era el compañero de Trigueros, pues Russo se había lesionado. El árbitro anuló el gol y el VAR corroboró que había fuera de juego, aunque muy justo. Pasado el susto la Deportiva siguió aguantando el empuje fuenlabreño. Mere también metió a Anderson en punta. Y cuando el partido tocaba a su final y ya se las prometía felices la parroquia deportivista, llegó el jarro de agua fría. Una falta en un costado del área la centró Hugo Fraile para que entrase alguien al remate, pero el balón pasó entre una nube de piernas, nadie lo tocó en defensa ni en ataque y acabó sorprendiendo a Manu para alojarse en las mallas bercianas y dejar a la Deportiva sin su primer triunfo a domicilio.
La Ponferradina se sitúa en la zona media de la clasificación a la espera de que se dispute la segunda mitad de la jornada. El próximo sábado desde las 20.30 horas en El Toralín recibirá al Alcorcón con una enfermería que suma efectivos, pero que podrían abandonar otros como Pablo Valcarce o Buenacasa.
Decenas de bercianos, la mayor parte de ellos residentes por trabajo o estudios en Madrid, asistieron al estadio Fernando Torres para animar a su equipo y verlo por primera vez en Segunda División. Al final, desolación por un lado al dejarse dos puntos a última hora, pero alegría por el estreno fuera de casa, por el penalti detenido por Manu y porque quizá el Fuenlabrada mereció al menos el resultado que se llevó, aunque el gol llegase a última hora.
