UNO A UNO

Ya proclamado mejor portero del Mundial, el capitán alemán fue el mayor responsable de la derrota, al no blocar el disparo de Rivaldo. Frigss. Sobrio en defensa y muy rápido en ataque, volvió loco a Roberto Carlos en la primera parte. En la segunda, más cansado, se fue diluyendo y cedió el protagonismo. Linke. Despejó casi todos los balones que le llegaron sin complicarse en ningún momento y estuvo bien por alto. Ramelow. Si hubiera subido con más decisión, podría haber sido un segundo Beckenbauer, porque en defensa estuvo impecable. Metzleder. Bastante seguro en defensa, a pesar de alguna jugada peligrosa en la que estuvo lento, demostró en sus incorporaciones al ataque, ya con el partido perdido, que no es delantero. Schneider. Se repartió por ambas bandas sembrando el peligro en la mayoría de las acciones que acometió. Algunos de sus centros podían haber terminado en las mallas si los alemanes hubieran estado más acertados. Hamann. Bien en el centro del campo, donde estuvo sobrio y seguro, se incorporó con peligro en ataque, pero en defensa perdió ante Ronaldo un balón absurdo que costó el primer gol. Jeremies. Tenía la difícil misión de reemplazar a Ballack y cumplió, aunque le falta la calidad del jugador del Leverkusen. Disparó con mucho peligro y contribuyó al desconcierto de los centrocampistas brasileños. Bode. En el centro del campo trabajó a destajo, pero tuvo algunas oportunidades en el área que falló por falta de criterio. Neuville. El mejor de los alemanes, hizo auténticas diabluras en la primera parte. Cambió de banda con frecuencia y metió pases de mérito al área. Klose. Estuvo trabajador por debajo de la frontal del área: bajó a recibir, se desdobló por las bandas y llegó a colaborar en defensa, pero bastante egoísta en un par de acciones de peligro. Bierhoff. En el único balón claro que dispuso en los pocos minutos que estuvo en el campo pudo haber recortado distancias, pero apareció Marcos. Asamoah. Voeller se equivocó al sacarle, porque está francamente fuera de forma. Inédito en ataque, fue incapaz de frenar a Ronaldo en el segundo gol. Ziege. Prácticamente no le dio tiempo más que tocar un par de balones.