La Cultural medita el mercado

La Cultural se acompasa con la abulia estival y respira antes de precipitarse en el mercado. Después de que la primera prioridad para la parcela técnica fuera atar a los jugadores que contaban con libertad contractual: caso de Fran e Iván Casquero, el equipo queda dispuesto para poner nombre a las vacantes. De momento, Mario, Rubén Vega y Quesada son las únicas novedades, además de Manu Ordóñez y Dani Alonso, que parecen destinados al filial pero pueden contar con oportunidades en el primer equipo. Por contra, se contabilizan once bajas, de momento, con respecto al plantel que terminó la liguilla de ascenso frente al Hospitalet. Desde la secretaría deportiva se intenta cuadrar balance atendiendo a las parcelas más desguarnecidas. La mayor urgencia es encontrar un hombre para la delantera (donde se descarta ya a Rubén Blaya, más seducido por la oferta del Figueras que por las aguas del Bernesga), un jugador de banda izquierda y otro portero (Iván Alonso y Manu Ordóñez ya son fijos). Tiempo habrá en el mercado de invierno para arreglar otros descosidos que se produzcan, puesto que el equipo culturalista suele planificar las incorporaciones en dos etapas, coincidiendo con los solsticios.