Ferrero y Moyá, dos resucitados

JUAN CARLOS Ferrero y Carlos Moyá saldaron su reincorporación al circuito después de un lapsus por lesión con llegadas a las finales de Rotterdam y Buenos Aires, donde ambos notaron el esfuerzo y cayeron ante rivales con especial motivación por la victoria. Ferrero se mantenía retirado de la competición desde que cayó en las semifinales del Abierto de Australia contra el suizo Roger Federer, ronda a la que llegó renqueante de una rotura fibrilar en los isquiotibiales que luego le impediría participar entre otras, en la confrontación de Copa Davis contra la República Checa disputada en Brno. Después de cuatro semanas de baja, y en su primera toma de contacto con el circuito, el valenciano alcanzó la final de Rotterdam para caer ante un ilusionado Lleyton Hewitt, que con su victoria vuelve al grupo de los diez primeros del mundo, y que avisó que hay que contar con él para la lucha por el número uno del mundo, hasta ahora centrada en Ferrero, Federer y Roddick. «Luchó como un león», dijo Ferrero, quien admitió que llegó algo cansado a la final después de agotadores encuentros donde a excepción de Martin Verkerk dejó K.O. a la armada holandesa, próxima rival en Copa Davis. «Quizás me sobró algún set de más», añadió el de Onteniente que ahora mantiene un balance de nueve victorias y tres derrotas en lo que lleva de año. Para Moyá, su derrota ante el argentino Guillermo Coria fue también dolorosa. El mallorquín mantenía hasta la final un récord de 14 victorias en el torneo de la capital argentina, que ganó en 1995 y en el 2003, y su juego siempre brilló allí. Las pistas del Buenos Aires Lawn Tennis, habían sido para él un talismán, «algo mágico», como él mismo describió, pero como Ferrero debutaba en un torneo después de casi cinco semanas de baja tras sufrir una lesión en el tobillo derecho cuando desplegaba su mejor tenis en la final de Sydney ante Hewitt. Anotadas ya las dos finales, los dos, Ferrero y Moyá, encaran esta semana los torneos de Marsella y el Abierto de Brasil en Costa do Sauipe, respectivamente. Y ambos parten como primeros cabezas de serie. El valenciano se mantiene en pista cubierta, a la búsqueda del segundo título de su carrera en ésta especialidad (Masters Series de Madrid 2003) y tendrá al francés Gregory Carraz como primer rival. Mientras tanto, Moyá continúa en tierra batida y debutará frente al alemán Thomas Behrend.